Los colonos israelíes en Cisjordania rebasan el medio millón
La población de colonos israelíes en Cisjordania supera el medio millón de personas, según un grupo proasentamientos, lo que marca un gran hito
La población de colonos israelíes en Cisjordania ha superado medio millón de personas, según dijo el jueves un grupo proasentamientos, lo que marcaba un gran hito. Líderes de asentamientos predijeron un crecimiento aún más rápido con el nuevo gobierno ultranacionalista israelí.
El reporte de WestBankJewishPopulationStats.com, basado en cifras oficiales, mostró que la población de asentamientos había crecido a 502.991 personas para el 1 de enero, un aumento de más del 2,5% en 12 meses y casi un 16% en los últimos cinco años.
“Hemos alcanzado un enorme hito”, dijo Baruch Gordon, director del grupo y residente del asentamiento de Beit El. “Estamos aquí para quedarnos”.
El nuevo gobierno israelí, formado por partidos ultranacionalistas que se oponen a la formación de un estado palestino, ha convertido la ampliación de asentamientos en su máxima prioridad. El gobierno ya ha prometido legalizar los puestos avanzados no autorizados, que contaban con apoyo del gobierno desde hacía tiempo, y acelerar la autorización y construcción de viviendas para colonos en Cisjordania.
“Creo que en los próximos años de este gobierno se construirá más que en los últimos 20 años de gobiernos”, dijo Gordon.
Los asentamientos han proliferado durante todos los gobiernos israelíes, incluso en el apogeo del proceso de paz en la década de 1990. Incluso el breve gobierno anterior, que incluía partidos a favor de un estado palestino y otros contrarios, siguió construyendo asentamientos.
El reporte se conocía en medio de un brote de violencia en la región y días después de una visita del secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, que prometió apoyo a un estado palestino independiente. La población de colonos ha seguido creciendo durante el gobierno de Biden pese a las nuevas peticiones estadounidenses de que se frenen las edificaciones tras años de estrategia de no intervención del expresidente Donald Trump.
La cifra de población en asentamientos no incluía Jerusalén Este, una zona anexionada y donde viven más de 200.000 colonos. Unos 3 millones de palestinos viven entre Cisjordania y Jerusalén Este.
Israel capturó Cisjordania, Jerusalén Este y la Franja de Gaza en la Guerra de Oriente Medio de 1967. Los palestinos reclaman esos territorios para un estado independiente.
Aunque Israel retiró tropas y miles de colonos de Gaza en 2005, ha seguido adelante con la construcción en Cisjordania y Jerusalén Este. Hay docenas de asentamientos repartidos por el territorio, algunos formados por un puñado de casas rodantes y otros tan grandes como ciudades, con centros comerciales y su propio transporte público.
Buena parte de la comunidad internacional ve los asentamientos como ilegítimos y un obstáculo para la paz. Los palestinos los consideran una ocupación de tierras que socava sus posibilidades de establecer un estado viable.
“Todos los asentamientos son ilegales. No hay legitimidad para los asentamientos o la presencia de colonos en los territorios palestinos”, dijo Nabil Abu Rudeineh, vocero del presidente palestino, Mahmud Abás. “El incremento en el número de colonos es el resultado de las políticas del gobierno israelí que no cree en la solución de dos estados”, que crearía un estado palestino independiente junto a Israel.
Israel afirma que Cisjordania es territorio disputado, en lugar de ocupado, y afirma que ese último término niega la presencia histórica del pueblo judío en esas tierras. Alega que el futuro de los asentamientos debe formar parte de las negociaciones para poner fin al conflicto.
Los esfuerzos de paz llevan casi 15 años en suspenso, un tiempo en el que Israel ha ido construyendo asentamientos en una política de hechos consumados mientras la rivalidad política entre palestinos complicaba la negociaciones.
Los colonos y sus numerosos partidarios en el gobierno ven Cisjordania como la patria bíblica e histórica del pueblo judío y se oponen a cualquier división.
Palestinos e israelíes viven bajo un sistema legal de dos niveles en Cisjordania, que otorga un estatus especial a los colonos y les aplica buena parte de las leyes israelíes, como el derecho a votar en las elecciones israelíes y el acceso a algunos servicios públicos. Los palestinos viven bajo un régimen militar israelí y no disfrutan de los derechos y protecciones legales concedidos a los colonos.
La ocupación militar indefinida ha hecho que tres conocidos grupos de derechos humanos concluyan que Israel comete el crimen internacional de apartheid al negar de forma sistemática la igualdad de derechos a los palestinos. Israel rechaza esas acusaciones que considera un ataque a su existencia como estado de mayoría judía, y señala a los avances de sus ciudadanos de origen palestino para refutar el argumento.
La Autoridad Palestina, cada vez más autoritaria e impopular y que se estableció con acuerdos en Israel en la década de 1990, gestiona partes de Cisjordania. El grupo armado islámico Hamas controla Gaza, que está sujeta a un bloqueo egipcio e israelí.