¿Se puede contener caos por colapso de Silicon Valley Bank?
¿Puede Washington salir al rescate de los depositantes del Silicon Valley Bank
¿Puede Washington salir al rescate de los depositantes del Silicon Valley Bank? ¿Es una opción políticamente posible?
Esas fueron algunas de las preguntas que circularon el domingo en Washington en momentos en que los políticos intentaban averiguar si el gobierno federal — y sus contribuyentes — deberían rescatar al banco colapsado que operaba principalmente en Silicon Valley, con toda su riqueza y poder.
Importantes personalidades y ejecutivos de Silicon Valley han estado apretando el enorme botón de pánico, diciendo que si Washington no sale al rescate de los depositantes de Silicon Valley, es posible que haya más pánico bancario esta semana.
“Los depósitos en Estados Unidos están a salvo o no lo están. Si no lo están, cuidado”, advirtió en Twitter David Sacks, de Craft Ventures, compañía con estrechos vínculos con los multimillonarios Elon Musk y Peter Thiel.
Silicon Valley Bank colapsó el viernes, mientras temerosos depositantes retiraban miles de millones de dólares de la institución en cuestión de horas, obligando a los reguladores bancarios federales a cerrar de manera urgente el banco a mitad de la jornada laboral para evitar el pánico bancario. Se trata del segundo peor colapso bancario en la historia de Estados Unidos, sólo detrás del de Washington Mutual durante el punto más alto de la crisis financiera de 2008.
Silicon Valley Bank era una criatura única en el mundo bancario. El 16to banco más grande del país ofrecía servicios principalmente a startups tecnológicas, empresas de capital de riesgo y empleados bien pagados de la industria tecnológica, como lo implica su nombre. Debido a esto, la gran mayoría de los depósitos en el Silicon Valley Bank eran en cuentas empresariales con saldos muy por encima del límite asegurado de 250.000 dólares.
Su colapso ha provocado que más de 150.000 millones de dólares en depósitos queden ahora congelados en quiebra, lo que significa que las startups y otros negocios podrían no tener acceso a su dinero por mucho tiempo.
Trabajadores de la Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC por sus iniciales en inglés), la agencia que asegura los depósitos bancarios menores a 250.000 dólares, han estado todo el fin de semana en busca de un posible comprador de los activos del banco. Han habido múltiples ofertas por los activos, pero hasta la mañana del domingo, seguían en custodia del gobierno federal.
A pesar del pánico proveniente de Silicon Valley, no hay indicios de que el colapso bancario pueda conducir a una crisis similar a la de 2008. El sistema bancario del país se encuentra en buena forma, cuenta con más capital que en cualquier otro momento de su historia, y se ha sometido a varias pruebas de estrés que demuestran que el sistema en general podría resistir incluso a una recesión económica significativa.