Senador McConnell acude a evento en Kentucky entre dudas sobre su salud

El líder republicano del Senado de Estados Unidos, Mitch McConnell, recibió una entusiasta bienvenida de personas leales al partido en una reunión política de alto perfil en su estado natal, en medio de un renovado escrutinio sobre su salud luego que el legislador de 81 años se paralizara a media frase durante una reciente conferencia de prensa en el Capitolio.

“Esta es mi Fancy Farm número 28 y les quiero asegurar que no será mi último”, dijo McConnell al principio de su discurso de desayuno antes del picnic anual que marca el inicio tradicional de la temporada de campañas de otoño. Fue la única referencia que hizo, aunque ambigua, sobre su salud.

McConnell, que muchos consideran el principal arquitecto de la subida al poder del Partido Republicano en Kentucky, llegó ante una larga ovación de pie y promovió la candidatura del fiscal del estado Daniel Cameron, su protegido, que se postula para gobernador este año.

McConnell ha sido una figura constante en el escenario de Fancy Farm, en donde desde hace mucho tiempo disfruta de las justas con los demócratas. Su salud cada vez recibe más atención desde que abandonó brevemente su propia conferencia de prensa en Washington el 26 de julio tras quedarse callado a media frase y ver al vacío durante varios segundos. Colegas republicanos parados tras él lo tomaron por los codos y lo acompañaron de regreso a su oficina. Cuando regresó para responder preguntas, McConnell dijo que estaba “bien”. Cuando se le preguntó si todavía es capaz de hacer su trabajo, respondió: “Sí”.

McConnell estuvo fuera del Senado durante casi seis semanas a principios de este año después de caerse y golpearse la cabeza durante un evento en un hotel de Washington. Fue hospitalizado varios días y su oficina informó posteriormente que sufrió traumatismo en la cabeza y se fracturó una costilla. En semanas recientes, su hablar ha sonado más titubeante, por lo que algunos colegas cuestionan su salud.

McConnell señaló que planea cumplir con su periodo como líder republicano — fue elegido para un periodo de dos años en enero y podría ser reelecto para el mismo puesto tras las elecciones de 2024. McConnell fue elegido al Senado por primera vez en 1984 y ha sido el líder republicano desde 2007. Se enfrentará a la reelección para el Senado en 2026.

En el desayuno del sábado, McConnell no habló sobre temas nacionales ni comentó sobre los enredos legales del expresidente Donald Trump. Tampoco se reunió después con la prensa. Durante su discurso de nueve minutos, McConnell acusó a los demócratas de haber dado “la espalda a la zona rural de Estados Unidos”.