Sudán: Generales rivales prometen asistir con evacuaciones

Personal de la embajada estadounidense fue evacuado vía aérea fuera de Sudán a primeras horas del domingo mientras las fuerzas leales a los dos generales en conflicto se disputan el control de la tercera nación más grande de África por noveno día en medio de menguantes esperanzas de paz.

Las partes en conflicto señalaron que estaban ayudando a coordinar la evacuación de extranjeros, aunque los continuos intercambios de fuego en la capital de Sudán pusieron en entredicho esas promesas.

Un alto funcionario del gobierno del presidente Joe Biden dijo que soldados llevaron a cabo la precaria evacuación de personal de la embajada de Estados Unidos. Los soldados que sacaron vía aérea al personal de Jartum dejaron a salvo el espacio aéreo sudanés, confirmó un segundo funcionario.

El grupo militar Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF por sus iniciales en inglés), que ha estado luchando contra el ejército sudanés, indicó que la misión de rescate estadounidense involucró seis aeronaves y que coordinó las labores de evacuación con Estados Unidos.

Las RSF, del general Mohammed Hamad Dagolo, aseveraron que están cooperando con todas las misiones diplomáticas y que están comprometidas con la tregua de tres días que se declaró al anochecer del viernes.

Horas antes, el general del Ejército, Abdel Fattah Burhan, dijo que facilitará la evacuación de ciudadanos estadounidenses, británicos, chinos y franceses de Sudán, después de dialogar con gobiernos de varios países que solicitaron ayuda.

Sin embargo, la situación en el terreno sigue siendo inestable. La mayoría de los aeropuertos principales se han convertido en campos de batalla y los intentos por salir de la capital han resultado sumamente peligrosos. Ambas partes han indicado que reanudarán los combates al concluir la tregua declarada de tres días.

Las preguntas persisten sobre cómo se llevarán a cabo los rescates multitudinarios de ciudadanos extranjeros, ya que el principal aeropuerto internacional de Sudán continúa cerrado y millones de personas se resguardan en interiores. A medida que las batallas entre el ejército sudanés y el poderoso grupo paramilitar se intensifican dentro y en los alrededores de Jartum, incluidas zonas residenciales, los gobiernos extranjeros han tenido problemas para repatriar a sus ciudadanos, muchos de los cuales siguen atrapados en sus hogares mientras comienzan a escasear los suministros y alimentos.