La Casa Blanca condena los proyectos de ley antiLGBT+
Jen Psaki dice que la ley “Don’t Say Gay” pone a “los padres y las niñas y niños LGBT+ en una circunstancia muy difícil y desoladora”
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo que la llamada ley “Don’t Say Gay” refleja “políticas malinformadas de odio que no hacen absolutamente nada para abordar los problemas reales” como estudiantes y familias LGBT+.
“Los padres de todo el país esperan que los líderes nacionales, estatales y de distrito apoyen a los y las estudiantes de nuestra nación, para garantizar que las y los niños sean tratados equitativamente en las escuelas, y esto no es un reflejo de eso”, comentó el 4 de abril.
Psaki respondió a una serie de preguntas de parte del corresponsal de Fox News Peter Doocy, quien cuestionó si la administración de Joe Biden cree que es “justo” que “hombres biológicos compitan contra mujeres” en deportes universitarios, y “a qué edad la Casa Blanca considera que los estudiantes deben ser educados sobre orientación sexual o identidad de género”.
También preguntó si la Casa Blanca apoya la instrucción en el aula sobre orientación sexual e identidad de género antes del jardín de niños; la ley “Derechos parentales en la educación” de Florida prohíbe la enseñanza en los salones sobre orientación sexual e identidad de género desde el jardín de niños hasta el tercer grado, “o de una manera que no sea apropiada para la edad o el desarrollo de los estudiantes de acuerdo con los estándares estatales” en otros grados.
Los defensores de la medida, entre ellos el gobernador Ron DeSantis, han afirmado repetidamente que la ley solo se aplica a los estudiantes más jóvenes, a pesar de su texto. El propio autor del proyecto de ley admitió que la ley se aplica en todos los grados.
“¿Tiene ejemplos de escuelas en Florida que estén enseñando a los niños de kínder sobre educación sexual?”, respondió Psaki. “Creo que esa es una pregunta relevante. Creo que esta es una ley dura y políticamente cargada que pone a los padres y los niños LGBT+ en una circunstancia muy difícil y desoladora”.
Agregó que el Departamento de Educación de EE.UU. está “bien posicionado y listo para evaluar qué hacer a continuación”, tras las declaraciones del secretario Miguel Cardona en las que sugirió que la ley de Florida podría estar violando la ley federal de derechos civiles, incluido el Título IX de las Enmiendas de Educación de 1972, que protege contra la discriminación basada en orientación sexual o identidad de género.
Un grupo de activistas LGBT+ de Florida, abogados de derechos civiles, estudiantes y familias demandaron al estado, alegando también violaciones al Título IX, así como violaciones a la Primera y la Decimocuarta Enmienda.
El Departamento de Justicia de EE.UU. también envió una carta a todos los fiscales generales estatales la semana pasada recordándoles las disposiciones constitucionales y legales federales que protegen a las personas trans de la discriminación.
“El Departamento de Justicia se compromete a garantizar que todos los niños puedan vivir libres de discriminación, abuso y acoso”, dijo en un comunicado la fiscal general adjunta Kristen Clarke de la División de Derechos Civiles del Departamento de Justicia.
La carta “reafirma la obligación de los funcionarios estatales y locales de garantizar que sus leyes y políticas no socaven ni dañen la salud y la seguridad de los niños y niñas, independientemente de su identidad de género”, señaló.
La semana pasada, Psaki criticó cuatro proyectos de ley promulgados en Arizona y Oklahoma enfocados en el derecho al aborto y los y las atletas trans, calificándolas como “extremos y dañinos”.
“Estas leyes son inaceptables y no dejaremos de luchar por la justicia y la igualdad”, prometió en Twitter.
Al menos 29 medidas en los EE.UU. buscan prohibir la atención médica de afirmación de género para jóvenes trans, o criminalizar esta atención acusando a padres y proveedores de salud de abuso infantil al aprobarla, según observadores legislativos de la ACLU y Freedom for All Americans.
Más de 50 proyectos de ley buscan prohibir que las y los atletas trans compitan en deportes escolares.
En 2021, nueve estados prohibieron a las y los atletas trans de participar en deportes que coincidieran con su género.
Solo en marzo, al menos cuatro prohibiciones similares se promulgaron o aprobaron en las legislaturas estatales de Arizona, Kentucky, Oklahoma y Utah.
El 30 de marzo, en una ceremonia de firma, rodeado de niños con carteles que decían “salvemos los deportes de mujeres”, el gobernador Stitt expresó que la ley de Oklahoma era “simplemente sentido común”.
“Cuando se trata de deportes y atletismo, las chicas deben competir contra chicas. Los chicos deben competir contra chicos”, comentó. “Es todo lo que dice este proyecto de ley”.
En su encuesta escolar nacional de 2019, la organización contra la discriminación LGBT+ GLSEN encontró que una “gran mayoría” del alumnado de Oklahoma escuchaba comentarios antiLGBT+, mientras que aproximadamente un tercio de los encuestados esuchaban regularmente comentarios homofóbicos de parte del personal de la escuela y casi la mitad, comentarios negativos sobre la expresión de género de alguien.
La mayoría de los encuestados (60 por ciento) nunca informaron el incidente al personal de la escuela, y solo el 21 por ciento del estudiantado LGBT+ que reportó un incidente señaló que resultó en una intervención efectiva del personal, según el informe.
Nicole McAfee, directora ejecutiva del grupo activista Freedom Oklahoma, explicó que los residentes LGBT+ están “exhaustos, aterrorizados, enojados”.
“Es inaceptable”, aseveraron en un comunicado. “Las chicas trans son chicas. Los habitantes de Oklahoma no binarios existen. Tener una representación de la diversidad sexual y de género disponible para los jóvenes no es obsceno, pero los esfuerzos no solo para censurarlo sino también criminalizarlo sin duda lo son”.