Francisco acusa a críticos de usar la muerte de Benedicto

El papa Francisco acusó a algunos de sus críticos el domingo de aprovecharse de la muerte del papa retirado Benedicto XVI para apuntarse resultados ideológicos en la ofensiva más reciente dentro de una división que afecta a la Iglesia católica.

Durante una conferencia de prensa en el vuelo de regreso desde Sudán del Sur, se le preguntó a Francisco acerca de las críticas que se incrementaron tras el fallecimiento de Benedicto el 31 de diciembre, el cual vivió en el Vaticano como papa emérito durante los primeros 10 años del pontificado de Francisco.

En los días y semanas tras su fallecimiento, Georg Gänswein, secretario personal de Benedicto durante largo tiempo, y algunos cardenales conservadores publicaron libros, concedieron entrevistas y emitieron memorándums en los que criticaron el papado de Francisco. Los comentarios generaron el efecto de enfrentar al pontífice alemán retirado recién fallecido —que siguió siendo un punto de referencia para los conservadores y tradicionalistas— con el papa actual.

Francisco insistió en que los rumores de las diferencias con Benedicto, y de que el papa retirado se sentía molesto con algunas decisiones que el pontífice argentino ha tomado, son falsos, y señaló que ambos se consultaban con frecuencia y estaban de acuerdo.

“Creo que la muerte de Benedicto fue instrumentalizada”, declaró Francisco. “Las personas querían anotarse puntos para su bando. Y las personas que instrumentalizan a una persona tan buena, tan cercana a Dios, yo casi diría... (que) esas personas carecen de ética; son personas que pertenecen a un partido, no a la Iglesia”.