Mujer mató a su novio con un dulce envenenado y convivió cuatro días con el cadáver
La mujer identificada como Julia Andrade Cathermol Pimenta es buscada por las autoridades de Brasil, al ser considerada la presunta culpable del asesinato de su pareja, Luiz Marcelo Antonio Ormond
En ell norte de Río de Janeiro, en el barrio popular de Engenho Novo, ocurrió el asesinato del empresario identificado como Luiz Marcelo Antonio Ormond, quien habría perdido la vida a manos de su pareja sentimental, Julia Andrade Cathermol Pimenta, en condiciones de extrema violencia.
Según los investigadores, tras emprender una exhaustiva búsqueda de respuestas, Andrade se convirtió en la principal sospechosa del crimen.
La noticia habría llegado a oídos de las autoridades por distintas denuncias de los vecinos, quienes percibían un olor de putrefacción en el edificio que compartían. Cuando los bomberos arribaron a la casa de Ormond, se percataron que el cuerpo del empresario yacía en la sala en estado de descomposición.
De acuerdo con las pesquisas, el cuerpo estaba rodeado por paquetes de morfina, al igual que dos ventiladores que fueron colocados a propósito para esparcir el olor a muerte sin mucho éxito.
Durante el proceso de investigación, las autoridades detallaron que, en días previos a su muerte, el empresario brasileño tenía un semblante desmejorado e, incluso, sus familiares confesaron que se enfermaba con más frecuencia y, días antes de su deceso, se reforzó la teoría de envenenamiento progresivo.
Algunas de las grabaciones recuperadas por la ley muestran cómo la pareja compartían viaje en un elevador, mientras él cargaba un plato con un bombón de chocolate; y ella sostenía una cerveza con la mano. En otras grabaciones, se podía percibir cómo la fémina miraba constantemente a la cámara, en una suerte de nerviosismo, refieren expertos.
Semanas más tarde, exámenes forenses confirmarían el envenenamiento del empresario; pues distintos estudios detallaron que el bombón de chocolate conocido como ‘brigadeirão’ generó ciertas manchas en su estómago, las cuales fueron el indicador irrefutable para las autoridades.
Lo que más sorprendió a las autoridades fue que Andrade pudo haber realizado sus actividades diarias, como ir al gimnasio, comer e, incluso, dormir; mientras su esposo permanecía sin vida en la sala del mismo hogar que compartieron. Además de que el cuerpo de Ormond tenía un golpe en la cabeza, presuntamente propinado por la misma mujer.
Aunque aún no se determina el móvil del asesinato, la aprehensión de una supuesta psíquica de nombre Suyane Breschak, dejó ver que Julia le debía 600.000 reales –lo equivalente a USD 120.000– por consultas espirituales y trabajos; mientras que Breschak fue puesta a disposición de las autoridades por poseer el coche y la computadora de Ormond.
Esto abriría la posibilidad de obtener más pistas acerca de las motivaciones y ambiciones de la hoy prófuga Julia Andrade.