“Me siento invisible”: Julius Jones y su familia comparten momentos finales mientras la esperanza se desvanece
El preso del corredor de la muerte de Oklahoma fue trasladado a la "vigilancia de la muerte"
El movimiento de inocencia para liberar al condenado a muerte de Oklahoma, Julius Jones, alcanzó alturas sin precedentes, atrajo el apoyo de algunas de las celebridades, diplomáticos y atletas más prominentes del mundo.
Pero con la ejecución de Jones programada para el 18 de noviembre, y el gobernador de Oklahoma, Kevin Stitt, sin dar señales públicas hasta ahora de que intervendrá para detenerlo, la familia Jones dice que nunca se han sentido más invisibles.
“Estoy vacía por dentro. Me siento invisible”, declaró Madeline Davis-Jones, madre de Julius, el miércoles, mientras la familia se dirigía a su última visita con Julius en la Penitenciaría Estatal de Oklahoma en McAlester antes de la ejecución el jueves.
Jones ha estado en el corredor de la muerte durante las últimas dos décadas por el asesinato en 1999 del empresario de la ciudad de Oklahoma, Paul Howell. Sin embargo, en los últimos años parecía que después de veinte años de incansable activismo, por fin se habían escuchado las afirmaciones de inocencia de Jones.
Un documental de ABC de 2018 llamado The Last Defense inspiró apoyo a nivel nacional para su caso, y este otoño la Junta de Indultos y Libertad Condicional de Oklahoma recomendó dos veces que lo sacaran del corredor de la muerte, al citar preguntas sobre si el tribunal identificó al verdadero asesino. Era la primera vez que la junta recomendaba un paso así en la historia del estado.
Pero Oklahoma tiene una larga historia de ejecución de hombres afroamericanos, y siempre se trataba de una batalla cuesta arriba. El estado ha llevado a cabo la mayor cantidad de ejecuciones per cápita en la historia moderna de EE.UU., tiene casi la tasa de encarcelamiento de afroamericanos más alta del país y una tasa de error desproporcionada cuando se trata de condenar de forma injusta a reclusos afroamericanos condenados a muerte.
La familia Howell, así como los funcionarios de Oklahoma como el fiscal general John O'Connor, aseguran que Jones fue el verdadero asesino. O'Connor comentó que estaba "cien por ciento seguro" en una entrevista el martes con KOCO.
“Revisé la evidencia en tres ocasiones diferentes, miré todas las pruebas y no tengo ninguna duda”, declaró el fiscal general.
Hasta el momento, el gobernador se ha negado a reunirse de froma directa con la familia Jones y, según los informes, "ora en soledad".
Jones también ha recurrido a su fe cristiana durante estos momentos tensos.
Se reunió el martes con el reverendo Keith Jossell, su consejero espiritual y exmaestro de escuela dominical.
Según los informes, Jones estaba tan encadenado que los hombres no podían abrazarse, como solían hacer cuando se encontraban.
"Estar encadenado como estaba, hizo que se le llenaran los ojos de lágrimas porque nadie quiere ser tratado como si fuera menos que un animal", declaró el reverenciado Jossell aThe Oklahoman.
Compartió con Jones un versículo de la Biblia para considerarlo a medida que se acerca la fecha de su ejecución.
El pasaje proviene de Hebreos 11:1, que dice: "Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve".
Jones está ahora bajo vigilancia de la muerte a medida que se acerca la fecha de su inyección letal, un proceso que incluye empaquetar sus posesiones para enviarlas a su familia, trasladarlo a una celda cerca de la cámara de ejecución y cortar sus privilegios telefónicos con el mundo exterior.
La fe ha sido durante mucho tiempo un factor de motivación para los activistas y líderes que se unieron para apoyar a Jones, y la fe, junto con la conciencia de otro gobernador cristiano, es a lo que ahora recurren para tomar una decisión final.
The Independent y la organización sin fines de lucro Responsible Business Initiative for Justice (RBIJ) lanzaron una campaña conjunta para pedir el fin de la pena de muerte en EE.UU. La RBIJ ha atraído a más de ciento cincuenta signatarios reconocidos de su Declaración de líderes empresariales contra la pena de muerte, The Independent es el último de la lista. Nos unimos a ejecutivos de alto perfil como Ariana Huffington, Sheryl Sandberg de Facebook y el fundador de Virgin Group, Sir Richard Branson, como parte de esta iniciativa y nos comprometemos a resaltar las injusticias de la pena de muerte en nuestra cobertura.