Exoneran a hombre condenado injustamente por violación de la autora de “The Lovely Bones”
“Nunca, jamás, pensé que vería el día en que me exonerarían”, dice Anthony Broadwater después de pasar 16 años en prisión
La condena de un hombre sentenciado injustamente por la violación de la autora de The Lovely Bones, Alice Sebold, en 1981, un crimen descrito en sus memorias de 1999, fue revocada.
Anthony Broadwater, de 61 años, tembló de emoción y sollozó con la cabeza entre las manos cuando un juez anuló la condena a solicitud de los fiscales el lunes.
“Nunca, jamás, pensé que llegaría el día en que me exonerarían”, dijo Broadwater, quien pasó 16 años en prisión por la violación de la célebre autora, ocurrida cuando ella era una estudiante de primer año en la Universidad de Syracuse, en 1981.
Sebold, de 58 años, escribió en su libro de memorias, Lucky, que fue atacada, y que luego vio a un hombre negro en la calle meses después, al que identificó como su atacante.
“Sonreía mientras se acercaba. Me reconoció. Para él era un paseo por el parque; se había encontrado a una conocida en la calle”, escribió Sebold.
“‘Oye, chica’, dijo. ‘¿No te conozco de alguna parte?’”.
Ella dijo que no respondió: “Lo miré directamente. Sabía que su rostro había sido el rostro sobre mí en el túnel”.
Sebold fue a la policía, pero no sabía el nombre del hombre, y un barrido inicial del área no logró localizarlo.
Un oficial sugirió que el hombre en la calle debía haber sido Broadwater, quien supuestamente había sido visto en el área.
Después de que Broadwater fuera arrestado, Sebold no pudo identificarlo durante un reconocimiento de sospechosos y eligió a un hombre diferente como su atacante porque “la expresión de sus ojos me decía que si estuviéramos solos, si no hubiera un muro entre nosotros, me llamaría por mi nombre y me mataría”.
No obstante, Broadwater fue juzgado y condenado en 1982, basándose en gran parte en dos pruebas.
En el estrado de los testigos, Sebold lo identificó como su violador. Y un experto dijo que el análisis microscópico de cabello había vinculado a Broadwater con el crimen. Desde entonces, ese tipo de análisis ha sido considerado “ciencia basura” por el Departamento de Justicia de Estados Unidos, informó Associated Press.
El libro de 2003 de Sebold, The Lovely Bones, sobre la violación y el asesinato de una adolescente, ganó el premio Libro del Año de Ficción para Adultos de la American Booksellers Association en 2003 y se convirtió en una película protagonizada por Saoirse Ronan, Susan Sarandon y Michael Imperioli.
Lucky también estaba en proceso de ser adaptado a una película, pero mientras redactaban el guion, los realizadores se volvieron escépticos sobre la culpabilidad de Broadwater.
El ex productor ejecutivo Tim Mucciante dijo que quería saber más sobre el caso después de notar inconsistencias entre el primer borrador del guion y el libro.
“Empecé a hurgar y a tratar de averiguar qué había pasado realmente”, dijo Mucciante a Associated Press el martes.
Después de abandonar el proyecto, el cineasta contrató a un investigador privado, que lo puso en contacto con David Hammond y Melissa Swartz, de la firma CDH Law, con sede en Syracuse.
Se pusieron en contacto con el fiscal de distrito del condado de Onondaga, William Fitzpatrick, quien se interesó personalmente en el caso y comprendió cómo los avances científicos habían arrojado dudas sobre el uso del análisis del cabello.
El lunes, Fitzpatrick le dijo al juez de la Corte Suprema estatal, Gordon Cuffy, que la acusación de Broadwater fue una injusticia.
“No voy a ensuciar este procedimiento diciendo ‘Lo siento’. Eso no es suficiente”, sostuvo Fitzpatrick. “Esto nunca debió de haber pasado”.
Fuera de la corte, Broadwater le dijo a The Post-Standard of Syracuse que el fiscal de distrito se había disculpado personalmente antes de la audiencia en la corte.
“Cuando me habló del daño que me hicieron, no pude evitar llorar”, confesó Broadwater.
“El alivio de que un fiscal de distrito de esa magnitud se pusiera de mi parte en este caso es tan profundo que no sé qué decir”.
Broadwater, quien ha trabajado como recolector de basura y personal de mantenimiento en los años desde que salió de prisión en 1999, dijo a The Associated Press que la condena por violación había arruinado sus perspectivas laborales y sus relaciones con amigos y familiares.
Incluso después de casarse con una mujer que creía en su inocencia, Broadwater nunca quiso tener hijos.
Ahora será eliminado del registro de agresores sexuales.
La editorial de Sebold, Scribner, una división de Simon and Schuster, informó a The Independent que la autora no tenía ningún comentario al respecto.
El destino de la adaptación cinematográfica de Lucky no está claro.
Associated Press contribuyó a este informe.