Su ropa desprende microplásticos: esto es lo que se está haciendo al respecto este Día de la Tierra

Botellas y bolsas, envoltorios de alimentos y pajitas. Tuberías, embalajes, juguetes y bandejas. El plástico está por todas partes, y sin embargo, algunas personas se sorprenderían al saber la cantidad que llevan realmente puesta.
Un armario típico está repleto de plástico — entretejido en la ropa deportiva de poliéster, los suéteres de acrílico, los trajes de baño de nailon y los calcetines elásticos— y libera fibras plásticas al medio ambiente sin parar.
Cuando estas prendas se usan, lavan y secan, desprenden fragmentos de fibras plásticas. Una sola colada en la lavadora puede liberar millones de ellas, tan diminutas que las plantas de tratamiento de aguas residuales no pueden capturarlas todas. Terminan en las vías fluviales locales que se conectan con el océano. Los animales marinos las ingieren y así pueden pasar el plástico a animales más grandes y a los humanos.
Incluso los tejidos naturales desprenden fibras y contienen químicos que pueden filtrarse en el medio ambiente. Pero el poliéster es la fibra más utilizada en la Tierra y, junto con otras fibras sintéticas, representa aproximadamente dos tercios de la producción mundial.
El martes es el Día de la Tierra, cuando personas de todo el mundo reflexionan sobre formas para reducir su impacto en el planeta.
“Todo el mundo que usa y lava ropa forma parte de este problema, pero todos los que usan y lavan ropa pueden ser parte de las soluciones”, afirmó Rachael Z. Miller, fundadora del Proyecto Rozalia para un Océano Limpio, con sede en Vermont.
Cambios simples como lavar las prendas con menos frecuencia y usar agua fría en lugar de caliente pueden ayudar a reducir el desprendimiento de fibras. Más complicado es que los textiles se produzcan y utilicen de una forma más sostenible, apuntó Elisa Tonda, que dirige la rama de recursos y mercados del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente. Por ejemplo, diseñar ropa que desprenda menos microfibras y sea de alta calidad para que dure más.
¿Qué hacer? Comience cambiando hábitos
La solución más sencilla es lavar la ropa con menos frecuencia, lo que reduce la fricción que rompe las fibras, indicó Anja Brandon, directora de políticas de plásticos en Ocean Conservancy.
"Se agitan y se mezclan con un montón de jabones, que realmente están diseñados para retirar la suciedad y las manchas", agregó.
Miller utiliza un quitamanchas para limpiar zonas específicas. Ambas dicen que en el lavado se desprenden menos fibras si se usa agua fría en cargas completas para reducir la fricción, en un ciclo más corto, y luego se cuelga a secar.
Inspirada en la forma en que los corales filtran el océano, Miller inventó la Cora Ball, una bola para la colada que se puede poner en la lavadora para reducir la fricción entre las prendas. También atrapa las microfibras. (Una parte de los beneficios va al Proyecto Rozalia). Otra opción es poner las telas sintéticas en una bolsa de lavado que capture las fibras.
¿Qué ropa desprende más? Para averiguarlo, presione una tira de cinta adhesiva transparente sobre una prenda, luego péguela en papel blanco para comprobar si hay fibras, dijo Miller. Las prendas que están tejidas o tricotadas de manera suelta tienden a desprender más, como los forros polares.
Miller afirmó que la gente no tiene por qué apresurarse a tirar la ropa que es más probable que desprenda fibras. Ella misma tienen chaquetas de forro polar. En su lugar, sugirió emplear esas prendas solo en interiores, o al aire libre con una capa encima, y pensar dos veces antes de adquirir más piezas de ese tipo.
"Trato de no culpar o alarmar a la gente porque mucha de esta información es muy nueva", manifestó. "Así que es mejor decir 'OK, lo entiendo. ¿Cómo puedo ser estratégico con lo que tengo?'"
Un esfuerzo para exigir filtros
Se pueden instalar filtros en las lavadoras para capturar microfibras. Samsung Electronics colaboró con Patagonia y la organización global de conservación Ocean Wise para lanzar uno en 2023. Ahora se vende en más de 20 países para lavadoras de carga frontal. Bosch lanzó recientemente otro en Europa.
Francia fue el primer país en adoptar una ley que exige que las nuevas lavadoras que se vendan en el país lleven un filtro para las microfibras, aunque la implementación se ha retrasado.
En Estados Unidos, los esfuerzos para exigir filtros en los estados han fracasado. El gobernador de California, Gavin Newsom, vetó un proyecto de ley en 2023, diciendo que le preocupaba el costo para los consumidores y que quería incentivar, no obligar, a tecnologías para eliminar microfibras en las aguas residuales. En Oregón, la senadora estatal Deb Patterson propuso un proyecto de ley este año que requiere filtros de microfibras en las nuevas lavadoras vendidas en el estado tras encontrar la tecnología en Canadá. Según Patterson, la iniciativa aún no tiene suficiente apoyo, pero seguirá intentándolo.
La Asociación de Fabricantes de Electrodomésticos se opone a las propuestas alegando que le preocupa el costo para los consumidores y la efectividad de los filtros.
Cambio de tejidos
Algunas grandes marcas están probando sus telas para ayudar a los investigadores a entender la fragmentación de fibras, incluyendo Adidas, Nike, Patagonia y Under Armour.
Están entre las más de 90 marcas, minoristas y fabricantes que se han asociado con The Microfibre Consortium en Reino Unido, fundado en 2018 para investigar y ofrecer soluciones para transformar la producción textil, incluyendo la reducción de la fragmentación de fibras.
Se han probado casi 1.500 tejidos. Ninguna es igual, lo que hace que sea un problema difícil de resolver, afirmó Kelly Sheridan, directora ejecutiva del consorcio.
Patagonia ha sido líder en tratar de detener la propagación de desechos de fibras sintéticas en el aire y el agua, argumentando que prevenirlo depende de las marcas del sector, ya que limpiar los microplásticos en el medio ambiente aún no es posible.
Hace una década, la firma financió su propia investigación sobre las repercusiones de sus productos. La empresa trabajó con proveedores para elegir telas y tintes y para dar acabados a las piezas que reduzcan el desprendimiento. Colaboraron en nuevas tecnologías de filtración para lavadoras, fábricas textiles y sistemas municipales.
Uno de sus estilos más conocidos es algo llamado "mejor suéter" que pasa del poliéster virgen al reciclado para reducir el desprendimiento en aproximadamente un 40%, dijo Matt Dwyer, vicepresidente de huella de producto global. Y en las fábricas textiles, se realiza un prelavado que puede capturar ese primer gran desprendimiento, agregó.
Dwyer es optimista acerca de los avances.
"Hay un montón de personas inteligentes, no solo entendiendo el problema y el alcance del problema, sino también buscando soluciones a lo largo del ciclo de fabricación y la fase de uso", afirmó. "Comparado con hace diez años, es un mundo completamente nuevo."
___
La cobertura educativa de The Associated Press recibe el apoyo financiero de varias fundaciones privadas. La AP es la única responsable del contenido. Encuentra los estándares de la AP para trabajar con organizaciones filantrópicas, una lista de las fundaciones y las áreas de cobertura que financian en AP.org.
___
Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.