México: Alejandro Gertz Manero, el fiscal de los 122 autos de lujo
A un mes de la salida de Santiago Nieto de la Unidad de Inteligencia Financiera se dio a conocer la investigación que esta dependencia desarrollaba sobre la riqueza del fiscal general Alejandro Gertz Manero, ambos personajes fueron antagonistas desde el inicio del sexenio.
El lunes 6 de diciembre, el diario mexicano El Universal dio a conocer que la Unidad de Inteligencia Financiera, que hasta hace unas semanas encabezaba Santiago Nieto, tenía abierta una investigación contra el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero por presunto enriquecimiento ilícito y operaciones de lavado de dinero.
Según la publicación, la dependencia investiga la adquisición de 122 autos de lujo por un total de 109 millones de pesos por parte del fiscal que ya había sido señalado anteriormente en los Panama Papers que revelaron las inversiones millonarias de la familia Gertz en las Islas Caimán.
La UIF también estaría tras las transferencias millonarias de la inmobiliaria Angelman, cuyos socios son el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, y su yerno, José Antonio Martí Munain, que solo entre 2019 y 2020, por medio de cheques, fueron por un total de 16,1 millones de pesos; mientras que de 2015 a 2021 los envíos habrían sumado 119 millones de pesos y al tiempo que recibieron 35 millones de pesos en transferencias.
Nieto y Gertz tuvieron varios enfrentamientos desde el inicio del sexenio y constantemente se acusaron de no realizar cada uno su trabajo.
“Nos presentan las denuncias sin las pruebas de Hacienda, tenemos que ir a su propia secretaría a que nos den las pruebas; entonces, la secretaría no nos da las pruebas y nos dicen que nosotros (la FGR) no avanzamos porque no tenemos las pruebas que nos debían de haber entregado. ¡Eso no se vale!”, dijo el fiscal en entrevista sobre cómo operaba la UIF.
Los otros escándalos de Gertz Manero
Al fiscal de la República le ha llovido sobre mojado. Apenas hace unas semanas la dependencia que encabeza fue evidenciada luego de que la periodista Lourdes Mendoza publicara en redes sociales las imágenes del exdirector de Petróleos Mexicanos, Emilio Lozoya Austin, cenando con los dueños de Altos Hornos de México en un restaurante de lujo en la Ciudad de México. Lozoya tenía dos años gozando del “criterio de oportunidad” que le había concedido Gertz Manero para aportar pruebas sobre la corrupción de varios funcionarios del gobierno anterior y no había pisado el reclusorio ni una sola vez desde que fue extraditado a México.
La Fiscalía había mantenido su buen trato hacia Lozoya, a pesar de que éste no había aportado hasta el momento una sola prueba que le permitiera procesar a los involucrados en la supuesta compra fraudulenta de la planta de Agronitrogenados, o en los presuntos sobornos que Odebrecht dio a los legisladores mexicanos para aprobar la reforma energética.
El trabajo del fiscal también ha sido cuestionado por emprender vendettas personales en contra de la familia de su hermano, específicamente de su exesposa, una mujer de la tercera edad que se encuentra recluida por el supuesto homicidio de Federico Gertz Manero en 2015.
En septiembre, el fiscal intentó sin éxito que un juez metiera en prisión preventiva a 31 científicos y académicos por un supuesto manejo irregular de fondos del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), institución que le había negado el acceso a su Sistema Nacional de Investigadores en varias ocasiones por su insuficiente producción científica.
El fiscal jubilado
Alejandro Gertz Manero, abogado nacido en la Ciudad de México en 1939, se había mantenido fuera del ojo público desde el 2009, cuando llegó al Congreso como plurinominal del Partido Convergencia, distanciándose del mismo en el 2012. En el 2000 sirvió en el gobierno de Vicente Fox como secretario de Seguridad Pública hasta que la fuga del “Chapo” Guzmán en el 2001 descarriló su desempeño.
En el 2004, Gertz pidió jubilarse tras cumplir 63 años y más de tres décadas de servicio público. Pero un reencuentro con Alfonso Durazo, también funcionario de Vicente Fox, lo reincorporó al ámbito político en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.