Argentina legaliza el aborto tras una votación histórica en el Senado
Con 38 votos a favor, el Senado aprobó una ley para interrumpir el embarazo hasta la semana 14 de gestación
Argentina se ha convertido en el primer país latinoamericano importante en legalizar el aborto, tras una larga campaña emprendida por activistas de los derechos de las mujeres.
Anteriormente, el aborto solo se permitía en Argentina si el embarazo se debía a una violación o en casos en los que la salud o la vida de la madre estaban en peligro.
Con 38 votos a favor y 29 en contra, con una abstención, el Senado aprobó la histórica legislación después de un prolongado debate que comenzó a las 4 de la tarde del martes.
Los activistas se vitorearon y se abrazaron fuera del congreso en la capital, Buenos Aires, cuando se anunció el veredicto en la madrugada del miércoles.
La nueva legislación, que permite a las mujeres abortar hasta la semana 14 de embarazo, fue aprobada por la Cámara Baja de Argentina a principios de mes.
Los intentos de legalizar el aborto fueron fuertemente rechazados por la Iglesia Católica en la nación socialmente conservadora, donde la interrupción del embarazo es un tema muy divisivo.
El presidente de Argentina, Alberto Fernández, quien presentó el proyecto de ley, dijo que la nueva legislación finalmente salvará vidas. Más de 38,000 mujeres se ven obligadas a ir al hospital cada año como resultado de interrupciones del embarazo ilegales que salen mal, y más de 3,000 han muerto desde 1983.
En 2018, el Senado rechazó un proyecto de ley de legalización del aborto por un estrecho margen, después de haber recibido la aprobación del Congreso.
El último proyecto de ley es el noveno en los últimos 15 años que aborda las leyes de aborto altamente restrictivas de la nación, que las activistas feministas se han esforzado por revocar durante más de tres décadas.
Mariela Belski, directora ejecutiva de la rama argentina de Amnistía Internacional, comentó a The Independent que la votación ha creado un "futuro más seguro e igualitario" para todas las mujeres y niñas que viven en el país.
“Hoy, Argentina ha extendido los derechos humanos a los 22 millones de mujeres y niñas en nuestro país. Esta victoria es más que legalizar el aborto. Se trata de proteger a las mujeres y las niñas para que puedan tomar las mejores decisiones para ellas mismas y su futuro sin poner en riesgo su salud y sus vidas”, declaró.
Los cuatro senadores que habían dicho anteriormente que no estaban seguros de votar a favor de la legislación sobre el aborto votaron a favor del proyecto de ley.
Paula Avila-Guillén, directora ejecutiva del Centro para la Igualdad de la Mujer, señaló que todos los congresistas que votaron a favor “acababan de salvar la vida de innumerables mujeres y niñas”.
El Papa Francisco, que es de Argentina, publicó un tuit horas antes del debate de 12 horas, declarando a “cada rechazado” como un “hijo de Dios”.
“El Hijo de Dios nació como un rechazado, para decirnos que todo rechazadoes un hijo de Dios”, dijo el Papa. “Vino al mundo como cada niño llega al mundo, débil y vulnerable, para que podamos aprender a aceptar nuestras debilidades con tierno amor”.
A principios de mes, una médico que realiza abortos en Argentina le dijo a The Independent que había visto a mujeres llegar a su centro de salud en situaciones desesperadas, después de tener que recurrir a abortos clandestinos inseguros.
La doctora Betiana Olearo, que trabaja en Córdoba, en el centro de Argentina, dijo: “Recuerdo a una mujer que murió en un centro de salud en el que trabajaba por tener un aborto clandestino. Esto fue impactante. No solo por su familia, sino también por su comunidad. Dejó cuatro hijos. Permanecieron solos después de su muerte".
Los activistas en el país del G20 dicen que las mujeres incluso han sido bloqueadas de forma rutinaria para que no obtengan abortos en los casos muy limitados en los que tienen derecho legal a acceder a ellos.
Un informe reciente de la Red de Acceso al Aborto Seguro de Argentina encontró que más de 7,000 niñas de entre 10 y 14 años en Argentina dieron a luz bebés entre 2016 y 2018, y los embarazos a menudo son el subproducto de una violación.
Fernández, quien juró como presidente en diciembre pasado, se comprometió a legalizar el aborto durante su primer discurso anual ante el Congreso. El mandatario argumentó que la ley actual había “condenado a muchas mujeres, generalmente de escasos recursos, a recurrir a prácticas abortivas en absoluto secreto, poniendo en riesgo su salud y en ocasiones su vida”.
Los activistas esperan que otros países de América Latina donde el aborto está muy restringido sigan el ejemplo de Argentina y legalicen las interrupciones, ya que la nación de 45 millones es muy influyente en la región.