Encuentran el cuerpo descuartizado de un empresario alemán en un congelador en Tailandia
El cuerpo descuartizado de un empresario alemán de 62 años que llevaba una semana desaparecido se encontró en el congelador de una casa en el sur de Tailandia, según dijo la policía el martes
El cuerpo descuartizado de un empresario alemán de 62 años que llevaba una semana desaparecido se encontró en el congelador de una casa en el sur de Tailandia, según dijo la policía el martes.
El cuerpo de Hans-Peter Mack se encontró en torno a las 23:00 del lunes, indicó Tawee Kudthalaeng, jefe de policía en la localidad de Nong Prue.
Los investigadores pudieron localizar el cuerpo utilizando las imágenes de cámaras de seguridad de la zona, dijo Tawee.
No entró en detalles, pero las imágenes y videos de las cámaras publicadas por medios tailandeses mostraban el congelador blanco en la parte trasera de una camioneta negra en la calle, con un hombre agachado al lado.
Mack había sido visto por última vez manejando su sedán Mercedes en Pattaya, una ciudad costera en el sur de Tailandia, según un aviso de persona desaparecida distribuido por su familia, que ofrecía una recompensa de 3 millones de bahts (86.000 dólares) por información que llevara a su regreso.
Las llamadas al teléfono incluido en el aviso no obtuvieron respuesta el martes.
Mack vivía en Pattaya con su esposa tailandesa y trabajaba como comerciante de bienes raíces, según reportes en medios locales. Vivía en Tailandia desde hacía varios años.
Su sedán Mercedes E350 apareció el domingo en el estacionamiento de un bloque de apartamentos en Nong Prue, una zona lujosa popular entre los extranjeros al nordeste de Pattaya, en la provincia de Chonburi.
Había restos de lo que parecía disolvente en los asientos, el salpicadero, el manubrio y otras zonas del auto, según la policía.
Una gran cantidad de dinero había desaparecido de la cuenta bancaria de Mack, señaló Tawee, algo que la policía creía relacionado con el crimen. El jefe de policía rechazó entrar en detalles, aunque dijo que había varios sospechosos, tanto alemanes como tailandeses.
La embajada alemana en Bangkok no respondió a llamadas telefónicas ni a un email pidiendo comentarios sobre el caso.