Buque de guerra del Reino Unido arriba a Guyana y eleva la tensión por disputa territorial
Un buque de guerra británico que se convirtió en motivo de tensión entre Venezuela y Guyana en su disputa por el territorio del Esequibo arribó a las costas guyanesas, se informó el viernes.
El 24 de diciembre, el Reino Unido anunció el traslado del buque HTMS Trent desde el Caribe hacia Guyana como muestra del apoyo a la ex colonia británica para la realización de prácticas conjuntas en altamar. El anuncio elevó las tensiones con Venezuela, que consideró que el hecho era una “provocación” y a su vez anunció el jueves la realización de ejercicios militares en el Atlántico.
Ambas naciones reclaman la soberanía del Esequibo, un territorio fronterizo de unos 160.000 kilómetros cuadrados rico en minerales y petróleo. Venezuela dice que le pertenece desde la época de la colonia española y que le habría sido despojado, según sus autoridades, en un arbitraje de 1899 que desconoce. Para el país llanero la solución debe generarse al amparo del Acuerdo de Ginebra de 1966, que establece la necesidad de buscar una salida satisfactoria para las partes.
Sin embargo, en 2018 Guyana demandó ante la Corte Internacional de Justicia de las Naciones Unidas la validación del arbitraje de 1899 que demarca sus fronteras.
Desde la cuenta oficial del HTMS Trent en la red social X se informó el viernes que recibió a bordo al jefe de Estado Mayor de Defensa de Guyana, brigadier Omar Khan, y a la alta comisionada británica en el país, Jane Miller OBE, además de otros dignatarios. El mensaje estuvo acompañado de fotos del recibimiento oficial y un recorrido de la comitiva en la embarcación con bandera británica.
No hubo una reacción inmediata del gobierno venezolano, que había solicitado a su par de Guyana emprender gestiones para su retiro.
Más temprano, Brasil expresó su preocupación por el agravamiento en las tensiones que generó este hecho entre Venezuela y Guyana, y pidió evitar manifestaciones militares de apoyo a las partes para que el proceso de diálogo dé resultados.
En un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores, el gobierno brasileño recordó a ambos países el compromiso “de no utilizar la fuerza ni la amenaza del uso de la fuerza”, así como “evitar incidentes” o “medidas unilaterales” que puedan conducir a un agravamiento de la disputa, como consta en la “Declaración de Argyle para el Diálogo y la Paz”, suscrita en San Vicente y las Granadinas.
Brasil consideró que debían "evitarse las manifestaciones militares de apoyo a cualquiera de las partes, para que el proceso de diálogo subyacente pueda producir resultados”.
El comunicado de la cancillería brasileña resaltó que la Declaración de Argyle —suscrita a mediados de diciembre durante la reunión de los presidentes de Guyana, Irfaan Ali, y de Venezuela, Nicolás Maduro— constituye “un hito en los esfuerzos por abordar pacíficamente la cuestión”.
De ahí que Brasil alentó a los dos países a retornar al diálogo y “el respeto al espíritu y las letras” de la declaración.
En tanto, el Reino Unido consideró el viernes que "las acciones de Venezuela contra Guyana son injustificadas y deberían cesar”, según declaró un portavoz del gobierno británico.
Maduro aseguró el jueves que respetan el acuerdo de Argyle, pero dijo que “Venezuela no se puede quedar de brazos cruzados frente a una amenaza” y anunció acciones militares en el Atlántico en las que participan más de 5.600 efectivos.
En respuesta, el presidente guyanés dijo que “ni Venezuela ni ningún otro Estado tiene nada que temer de las actividades dentro del territorio o aguas soberanas”, señalando que las asociaciones con Estados regionales e internacionales están destinadas a “mejorar la seguridad interna” y no pretenden ser “un acto ofensivo contra ningún Estado”.