Tropas rusas sufren enfermedades por radiación tras cavar trincheras y pescar en Chernóbil
Las tropas rusas “montaron campamentos, pescaron y excavaron posiciones defensivas a diez kilómetros de la planta de energía”
Las tropas rusas que cavaron trincheras en el bosque de Chernóbil durante su ocupación del área sufrieron enfermedades por radiación, confirmaron las autoridades.
Los ucranianos que viven cerca de la central nuclear que explotó hace 37 años, e inundó el área circundante con contaminantes radiactivos, advirtieron a los rusos cuando llegaron que no acamparan en el bosque.
Pero los ocupantes que, como dijo un residente a The Times, “comprendieron los riesgos”, pero no eran “muy sagaces”, se instalaron en el bosque, excavaron trincheras, pescaron en el canal de enfriamiento del reactor (lleno de bagres) y dispararon a los animales, dejándolos muertos en las carreteras.
El reactor n° 4 de la planta de energía nuclear de Chernóbil explotó el 26 de abril de 1986. Se le conoce como el peor incidente nuclear civil del mundo. Decenas murieron como resultado y la URSS colapsó menos de seis años después.
Evacuaron por completo a las poblaciones de la ciudad de Pripyat y la zona de exclusión de 30 kilómetros (19 millas) que la rodea, y la limpieza está programada para finalizar en 2065.
En los años posteriores al incidente, se enviaron equipos de hombres para desenterrar la capa superficial contaminada y enterrarla bajo tierra en el “bosque rojo”, llamado así por el color que adquirieron los árboles como resultado de la catástrofe.
El 24 de febrero de 2022, las fuerzas rusas entraron en Chernóbil desde Bielorrusia, y estuvieron instalados durante cinco semanas.
“Empecé a gritarles”, Baba Hana, residente de Chernóbil, de 90 años, le dijo a The Times, relatando una confrontación con las fuerzas invasoras.
“Traté de darles información política, explicándoles lo que estaba pasando en su país… Hablo ruso, les pregunté qué estaban haciendo allí, que a quién creían que estaban liberando”.
Según los informes, los hombres de Vladimir Putin establecieron un campamento dentro de un radio de diez kilómetros (seis millas) del reactor 4 y excavaron posiciones defensivas en el suelo venenoso debajo de la superficie.
El 1 de abril, mientras las tropas ucranianas lanzaban contraataques desde Kyiv, los últimos ocupantes se retiraron y dejaron tras de sí montones de basura.
Los soldados rusos instalados en el bosque desde entonces sufrieron enfermedades por radiación, confirmaron diplomáticos. Los síntomas pueden comenzar una hora después de la exposición y pueden durar varios meses, lo que a menudo resulta en la muerte.
“No intentes encontrar la lógica, es estúpido”, dijo al periódico Oksana Pyshna, de 30 años, una guía turística convertida en empleada del ministerio estatal responsable de la zona de exclusión.
Traducción de Michelle Padilla