Coalición izquierdista francesa indignada por el rechazo de Macron a su candidata a primera ministra
La principal coalición izquierdista de Francia acusó el martes al presidente Emmanuel Macron de actuar de forma antidemocrática después de que rechazara a la candidata del Nuevo Frente Popular a primera ministra tras las elecciones no concluyentes del mes pasado.
La Constitución francesa le otorga a Macron, como presidente, el poder exclusivo de nombrar al primer ministro.
Los políticos franceses han llegado a un impasse sobre el nuevo gobierno desde que una votación legislativa anticipada en julio no produjo un claro ganador. Las recientes tensiones incluyen un llamado a realizar protestas masivas contra Macron la próxima semana, mientras París se prepara para acoger los Juegos Paralímpicos con la ceremonia de apertura programada para el miércoles por la noche.
La coalición Nuevo Frente Popular obtuvo el mayor número de escaños en la Asamblea Nacional. La alianza centrista de Macron quedó en segundo lugar, y la ultraderechista Agrupación Nacional en tercero, dejando a la poderosa cámara baja del parlamento francés sin ningún partido mayoritario.
Aun así, la coalición de izquierdas, que incluye el partido de extrema izquierda Francia Insumisa, los socialistas y los verdes, ha insistido en que el nuevo primer ministro debe salir de sus filas porque es el grupo más numeroso.
El lunes, Macron rechazó a su candidata a primera ministra -la poco conocida funcionaria Lucie Castets- diciendo que su decisión de rechazar un gobierno liderado por el Nuevo Frente Popular tiene como objetivo garantizar la “estabilidad institucional”.
El Parlamento, profundamente fracturado, no respaldaría un gobierno de izquierdas, dijo Macron, y anunció otra ronda de consultas con los líderes políticos. Pidió a los líderes de la izquierda que busquen la cooperación con partidos fuera de su coalición, incluida la alianza centrista del presidente.
Los líderes izquierdistas arremetieron contra Macron, acusándolo de poner en peligro la democracia francesa y de negarse a aceptar los resultados electorales. Los socialistas y los verdes se negaron a reunirse con el presidente para una nueva ronda de negociaciones el martes. Francia Insumisa, cuyos líderes no fueron invitados al palacio presidencial del Elíseo, convocaron protestas masivas contra Macron.