Consejo alemán aprueba plan de Tesla para ampliar planta cerca de Berlín
Un consejo municipal de Alemania aprobó un plan del fabricante de autos eléctricos Tesla para ampliar el terreno de su primera planta en Europa, una propuesta que ha provocado constantes protestas este año.
La tarde del jueves, los concejales del municipio de Gruenheide, justo a las afueras de Berlín, votaron a favor del plan 11 a 6, con dos abstenciones, reportó la agencia noticiosa alemana dpa. La propuesta se ajustó de forma que se talarán menos árboles de los que se tenía previsto originalmente.
Tesla desea añadir una estación de carga y un espacio logístico a su fábrica, inaugurada en 2022.
En una votación no vinculante realizada a mediados de febrero, los residentes de Gruenheide rechazaron la propuesta original de Tesla, que habría significado la eliminación de más de 100 hectáreas (247 acres) de árboles.
Varios activistas han protestado desde febrero en un bosque cercano a la planta por preocupaciones sobre el agua y la deforestación. Horas antes de la reunión del Consejo, un tribunal ordenó que, por ahora, la policía no puede desmontar las casas en los árboles que los activistas construyeron en el área.
“Detengan a Tesla”, un grupo que apoya la protesta, dijo el viernes que le decepciona la decisión del Consejo y prometió seguir protestando.
“Debemos seguir protegiendo el agua y el bosque en tanto se necesite nuestra protección”, señaló en un comunicado.
El gobierno estatal de Brandemburgo, que rodea a Berlín, se congratuló de la decisión del Consejo. El ministro regional de economía, Jörg Steinbach, la describió como “una fuerte señal del futuro desarrollo de Gruenheide y Tesla”.
En marzo, un incendio presuntamente intencionado en una torre de alta tensión, reivindicado por un grupo de extrema izquierda, dejó sin electricidad a la planta e interrumpió la producción por cerca de una semana.
En aquel momento, el director ejecutivo de la empresa Elon Musk calificó a los culpables como “los ecoterroristas más tontos de la Tierra” y sostuvo que los manifestantes anti-Tesla estaban equivocados por tratar de detener la producción de vehículos eléctricos en lugar de la de aquellos impulsados por combustibles fósiles.