CPI denuncia a Mongolia por no arrestar a Putin durante su visita el mes pasado
Un panel de jueces de la Corte Penal Internacional (CPI) denunció el jueves a Mongolia ante la organización de supervisión de la corte por no arrestar al presidente ruso Vladímir Putin cuando visitó la nación asiática el mes pasado.
La visita de Putin fue la primera a un Estado miembro del CPI desde que el tribunal emitió una orden de arresto en su contra el año pasado por cargos de crímenes de guerra, acusándolo de responsabilidad personal por los secuestros de niños de Ucrania. Rusia no es miembro del tribunal y el Kremlin ha rechazado los cargos.
“Los Estados Partes y aquellos que aceptan la jurisdicción de la Corte tienen el deber de arrestar y entregar a individuos sujetos a órdenes de la CPI, independientemente de su cargo oficial o nacionalidad”, detalló la CPI en un comunicado.
Putin es buscado por la corte por su presunta responsabilidad personal por el crimen de guerra de deportación ilegal de niños y traslado ilegal de niños desde áreas ocupadas de Ucrania a la Federación Rusa.
En lugar de arrestar a Putin, las autoridades mongolas desplegaron la alfombra roja. El presidente ruso fue recibido en la plaza principal de la capital, Ulán Bator, por una guardia de honor vestida con vivos uniformes rojos y azules inspirados en los de la guardia personal del gobernante del siglo XIII Genghis Khan, el fundador del Imperio Mongol.
Antes de la visita, Ucrania había instado a Mongolia a entregar a Putin al tribunal de La Haya, y la Unión Europea expresó su preocupación de que Mongolia no ejecutara la orden.
“En vista de la gravedad de la falta de cooperación de Mongolia con la Corte, la Sala consideró necesario remitir el asunto a la Asamblea de los Estados Partes”, indicó la corte, refiriéndose a su órgano de supervisión que se reunirá en diciembre en La Haya.