Demócratas intentan forzar un voto sobre ayuda a Ucrania
Los demócratas de la Cámara de Representantes pusieron en marcha el martes un arriesgado esfuerzo para obligar a una votación sobre los 95.000 millones de dólares en ayuda para Ucrania, Israel y Taiwán, aumentando la presión al líder de la cámara baja Mike Johnson para que adopte el paquete de financiación exterior.
Los representantes demócratas, que son minoría, comenzaron a reunir firmas para una “petición de alta”, un instrumento de procedimiento poco usado que puede sortear el control del presidente de la Cámara de Representantes sobre cuáles proyectos de ley se someten a votación.
Para que la petición genere una acción en la Cámara, debe ser firmada por una mayoría de legisladores, es decir, 218 miembros. Dado que los republicanos controlan el recinto en una proporción de 219 a 213, al menos algunos de ellos deberán rebelarse contra sus líderes y firmar la petición para lograr una mayoría. Además, es poco probable que algunos demócratas progresistas firmen, debido a que el proyecto de ley incluye ayuda militar para Israel.
Esta acción destaca el persistente punto muerto en el Congreso por los aproximadamente 60.000 millones en ayuda militar para Ucrania, en el que los conservadores se niegan a proporcionar más municiones y armas a Kiev. Johnson, republicano de Luisiana, se ha resistido a adoptar el paquete aprobado el mes pasado por el Senado y ha insistido en que la Cámara de Representantes trabaja en su propio enfoque sobre la materia. Ha indicado que la sala analizará el paquete hasta que se acuerden los fondos para el gobierno, y aún insiste en que los fondos se deben igualar con cambios políticos en la frontera entre Estados Unidos y México.
Al mismo tiempo, los soldados ucranianos sufren de escasez de municiones y Estados Unidos ha suspendido el envío de suministros desde hace meses.
Johnson ha enfrentado llamados de ambos partidos para hacer avanzar el paquete de ayuda exterior. Algunos republicanos de la cámara baja tratan ahora de redactar su propia versión del proyecto de ley con la esperanza de terminar con el punto muerto. Su versión reduce la ayuda exterior para Ucrania de manera que sólo se asigne al ejército de ese país, y no al funcionamiento de su gobierno.
Johnson ha alentado a los republicanos a que se resistan a firmar cualesquier peticiones de alta y dijo que abordará la ayuda para Kiev, pero no ha presentado ningún plan claro.