Encarcelan a dos periodistas rusos acusados de "extremismo" por trabajar para grupo de Navalny
Dos periodistas rusos acusados de “extremismo” fueron arrestados por el gobierno de su país, y el tribunal ordenó el sábado que permanezcan detenidos en espera de investigación y juicio por acusaciones de trabajar para un grupo fundado por el fallecido político opositor Alexei Navalny.
Konstantin Gabov y Sergey Karelin negaron los cargos por los que se ordenó su detención por un mínimo de dos meses antes de iniciar cualquier juicio. Cada uno enfrenta una condena mínima de dos años en prisión y una máxima de 6 por su presunta “participación en una organización extremista”, de acuerdo con tribunales rusos.
Ellos son los periodistas arrestados más recientemente en medio de la represión del gobierno ruso contra el disenso y los medios independientes, la cual se ha intensificado tras la invasión rusa a Ucrania hace más de 2 años. Rusia aprobó leyes que penalizan lo que considera información falsa sobre el ejército o declaraciones que parezcan desacreditar a esa institución, proscribiendo, en los hechos, cualquier crítica contra la guerra en Ucrania o los discursos que se aparten de la narrativa oficial.
Sergei Mingazov, periodista de la edición rusa de la revista Forbes, fue detenido por acusaciones de difundir información falsa sobre el ejército ruso, dijo su abogado el viernes.
Gabov y Karelin están acusados de preparar materiales para un canal de YouTube dirigido por la Fundación para Combatir la Corrupción, creada por Navalny y que ha sido proscrita por las autoridades rusas. Navalny murió en febrero en una colonia penal del Ártico.
Gabov, detenido en Moscú, es un productor independiente que ha trabajado para distintas organizaciones, entre ellas, Reuters, indicó el área de prensa del tribunal. Por el momento, Reuters no ha comentado sobre el fallo del tribunal.
Karelin, que tiene además la nacionalidad israelí, fue detenido la noche del viernes en la región de Murmansk, en el norte de Rusia.
Karelin, de 41 años, ha trabajado para varios medios, entre ellos, The Associated Press. Fue camarógrafo del medio alemán Deutsche Welle hasta que el Kremlin prohibió el trabajo de ese medio en Rusia en febrero de 2022.
“The Associated Press está muy preocupada por la detención del videoperiodista Sergey Karelin”, dijo la AP en un comunicado. “Estamos en busca de información adicional”.
La represión de Rusia contra el disenso se centra en figuras de la oposición, periodistas, activistas, miembros de la comunidad LGBTQ+, y rusos comunes que se muestran críticos al kremlin. Varios periodistas han sido encarcelados como represalia por cubrir las actividades de Navalny, entre ellos, Antonina Favorskaya, que sigue en detención previa al juicio al menos hasta el 28 de mayo, después de una audiencia realizada el mes pasado.
Favorskaya fue detenida y acusada por las autoridades rusas de formar parte de una “organización extremista” por publicar en las plataformas de redes sociales de la fundación de Navalny. Ella cubrió durante años las audiencias de Navalny en el tribunal y filmó el último video de Navalny antes de su muerte en la colonia penal.
Kira Yarmysh, vocera de Navalny, dijo que Favorskaya no publicó nada en las plataformas de la fundación e indicó que las autoridades rusas la atacaron por hacer su trabajo como periodista.
Evan Gershovich, reportero estadounidense de 32 años de The Wall Street Journal, está en espera de juicio por acusaciones de espionaje en la famosa prisión de Lefortovo en Moscú. Gershkovich y su empleador han negado vehementemente las acusaciones.
Gershkovich fue detenido en marzo de 2023 cuando se encontraba en un viaje de trabajo y ha pasado más de un año en prisión; las autoridades no han dicho qué pruebas tienen, si las hay, para apoyar sus acusaciones de espionaje.
El gobierno estadounidense ha declarado que Gershkovich fue detenido injustamente, y las autoridades han acusado a Moscú de utilizar al periodista como un peón para fines políticos.
El gobierno ruso también ha utilizado medidas represivas contra figuras de la oposición. Vladímir Kara-Murza, prominente activista, fue sentenciado a 25 años de prisión.