Abogada del exesposo violador de Gisèle Pelicot ofrece una actualización sobre su cliente encarcelado
Gisèle ha sido alabada en todo el mundo por su valentía
El exesposo de Gisèle Pelicot no apelará su condena a prisión por drogarla y violarla y permitir que docenas de otros hombres también la forzaran mientras estaba inconsciente, dijo el lunes su abogado.
Dominique Pelicot fue encarcelado durante 20 años tras el juicio que conmocionó al mundo.
Su abogada, Béatrice Zavarro, afirma que Pelicot quiere evitar a su ex esposa el calvario de otro juicio.
En una entrevista televisiva, la abogada dijo que 17 de los otros 50 hombres declarados culpables este mes tras un juicio que duró más de tres meses sí decidieron apelar sus sentencias.
Pelicot, condenado a 20 años de prisión, pasó casi 10 años contactando a desconocidos a los que invitó a entrar en la casa familiar para violar a su esposa mientras estaba fuertemente sedada con somníferos.
El hombre de 72 años fue declarado culpable de violación, mientras que sus 50 coacusados también fueron declarados culpables de violación, intento de violación o agresión sexual.
El tribunal de la ciudad de Aviñón, en el sur de Francia, dictó penas de entre tres y 15 años de prisión para los 50 hombres, declarados culpables de violación, intento de violación y agresión sexual contra Gisèle Pelicot en un periodo de casi una década.
El tribunal declaró a Dominique Pelicot culpable de violación y de todos los demás cargos que se le imputaban, y lo condenó a 20 años de prisión, el máximo posible. A sus 72 años, podría pasar el resto de su vida entre rejas. No podrá solicitar la libertad condicional hasta que haya cumplido al menos dos tercios de la condena.
Por otra parte, uno de los hombres que sí presentaría una apelación es el viticultor Charly Arbo, de 30 años.
Arbo acudió al domicilio de Pelicot en seis ocasiones distintas y fue condenado a 13 años de prisión. También fue acusado de violar a Gisèle la noche de su 66° cumpleaños, y en las pruebas de video se le veía hablando de drogar y violar a su propia madre con Dominique Pelicot.
Gisèle, quien ha sido aplaudida en todo el mundo por su valentía, optó por abandonar el anonimato y arrojar luz sobre el juicio en un intento de que “la vergüenza cambie de bando”, de la víctima al violador.
Traducción de Sara Pignatiello