Líderes mundiales estudian en Suiza posible hoja de ruta para paz en Ucrania, con ausencia de Rusia
Los presidentes de Ecuador, Costa de Marfil, Kenia y Somalia participarán junto a líderes occidentales, entre otros, en una conferencia que se celebrará este fin de semana en Suiza con el objetivo de trazar los primeros pasos hacia la paz en Ucrania, con la notable ausencia de Rusia.
Según las autoridades suizas que organizan la conferencia, más de 50 jefes de Estado y de gobierno, entre los que está el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, asistirán a la cumbre en el complejo turístico de Bürgenstock, sobre el lago Lucerna. Un centenar de delegaciones, incluyendo las de organismos europeos y Naciones Unidas, participarán en el evento.
Quién acudirá — y quién no — se ha convertido en uno de los asuntos clave en una reunión que, según los críticos, será inútil sin la presencia del gobierno del presidente ruso, Vladímir Putin, que ordenó la invasión del país vecino en febrero de 2022 y sigue adelante con la guerra.
Está previsto que asista la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, mientras que Turquía y Arabia Saudí enviaron a sus ministros de Exteriores. Países en desarrollo clave, como Brasil — que fungirá como observador —, India y Sudáfrica, estarán representados por funcionarios de rango más bajo.
China, que respalda a Rusia, será una de las docenas de países que no acudirán, muchos de ellos con problemas más acuciantes que el conflicto más sangriento en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. Beijing sostiene que cualquier proceso de paz debe contar con la participación tanto de Moscú como de Kiev, y ha presentando su propio plan.
Zelenskyy encabezó recientemente una campaña diplomática para fomentar la participación en la reunión en Suiza.
Las tropas del Kremlin controlan ahora casi una cuarta parte del territorio ucraniano en el este y el sur, y en los últimos meses han logrado algunos avances territoriales. Cuando se empezó a hablar de la iniciativa de paz en Suiza el verano pasado, las fuerzas ucranianas acababan de recuperar grandes zonas de su territorio, especialmente cerca de las ciudades de Jersón, en el sur, y Járkiv, en el norte.
Con los combates sobre el terreno y la estrategia diplomática como telón de fondo, los organizadores de la cumbre han presentado una agenda con tres puntos: la seguridad nuclear, por ejemplo en la central de Zaporiyia, controlada por Rusia; la ayuda humanitaria y el intercambio de prisioneros de guerra, y la seguridad alimentaria global, que se ha visto interrumpida en algunos momentos por los problemas en el transporte marítimo en el mar Negro.
El listado, que incluye algunas de las cuestiones menos polémicos, está bastante lejos de las propuestas y esperanzas enumeradas por Zelenskyy en el plan de paz de 10 puntos presentado a finales de 2022.
El gobierno de Putin, por su parte, quiere que cualquier acuerdo de paz se construya en torno a un borrador de acuerdo negociado en las primeras fases de la guerra que incluía disposiciones sobre el estatus de neutralidad de Ucrania y límites a sus fuerzas armadas, además de retrasar las conversaciones acerca de las zonas zonas ocupadas por Rusia. La presión ejercida durante años por Kiev para ingresar en la OTAN ha enojado al Kremlin.