Macron viaja a Nueva Caledonia en medio de disturbios
El presidente francés Emmanuel Macron viajó el miércoles a Nueva Caledonia en un intento por hallarle una solución política a los disturbios que han estremecido al archipiélago francés en el Pacífico.
Los disturbios han suscitado nuevas interrogantes sobre el manejo que le está dando Macron al legado colonialista francés. Ha habido décadas de tensiones entre los indígenas Kanaks, que buscan la independencia del territorio de 270.000 habitantes, y los descendientes de los colonialistas y otros que quieren seguir siendo parte de Francia.
Los disturbios estallaron el 13 de mayo mientras la legislatura francesa en París debatía enmendar la constitución francesa para hacerle cambios al padrón electoral en Nueva Caledonia. Los opositores a la medida temen que beneficiará a políticos profranceses en Nueva Caledonia y que marginalizará aun más a los Kanaks, que antes sufrían de segregación y discriminación.
Macron tiene previsto aterrizar el jueves en la mañana en Nueva Caledonia. El Palacio de los Elíseos dijo que se enfocará en restaurar el orden y facilitar el diálogo entre líderes locales, y en la necesidad de emprender una reconstrucción significativa luego de la violencia que habría causado daños por los cientos de millones de euros (dólares).
Macron buscará también expresar solidaridad con los habitantes del territorio, agradecer a las fuerzas de seguridad y reunirse con líderes para hablar de reconstrucción y temas políticos. Macron ha estado desde hace mucho activo en el ámbito político de Nueva Caledonia, particularmente en cuanto a facilitar el diálogo entre facciones proindependencia y profrancesas. Sus esfuerzos culminaron en un referéndum en 2018 en que los habitantes del territorio votaron a favor de seguir siendo parte de Francia, aunque por un margen muy pequeño.
La Alta Comisión para Nueva Caledonia reportó el miércoles que 1.050 refuerzos de la gendarmería, la policía y la seguridad civil han sido desplegados, más de 90 bloqueos viales habían sido despejados, más de 280 amotinados habían sido arrestados, 84 policías y gendarmes habían sido heridos, y ninguna fatalidad nueva ha sido reportada. Seis personas han fallecido en la violencia hasta ahora, incluyendo dos gendarmes.