Polonia reforzará más su frontera con Bielorrusia después de que un soldado fuera apuñalado
El primer ministro de Polonia, Donald Tusk, dijo el miércoles que sus fuerzas seguirían fortificando la frontera con Bielorrusia y que pueden utilizar “todos los medios disponibles” para defender la frontera de la OTAN, después de que un soldado fuera apuñalado y herido de gravedad.
Tusk dijo que se establecería una zona de separación de unos 200 metros (660 pies) de ancho a lo largo de la frontera, que también es la frontera oriental de la Unión Europea, además de la barrera de metal de 190 kilómetros (118 millas) ya colocada para evitar la llegada de migrantes desde Bielorrusia. Polonia acusa a Rusia y Bielorrusia de organizar un flujo de migración ilegal como forma de presión.
Tusk dijo que el gobierno tomaría una decisión sobre la zona de separación la próxima semana.
El primer ministro, junto con los ministros de Interior y Defensa, visitó a tropas, guardias fronterizos y fuerzas policiales que aseguran la frontera, después de que un soldado fuera apuñalado la madrugada del martes cerca del pueblo de Dubicze Cerkiewne.
El soldado seguía hospitalizado en estado grave, según las autoridades.
Las autoridades dijeron que un migrante había extendido la mano entre las barras de más de 5 metros (16 pies) de alto que separan Polonia de Bielorrusia y apuñalado al soldado en las costillas. Las fuerzas de seguridad polacas no pudieron detener al agresor porque estaba en el lado bielorruso de la barrera, según las autoridades.
“No hay margen para negociación. La frontera de Polonia debe estar protegida”, dijo Tusk. “Los soldados polacos, guardias fronterizos, agentes, se han convertido en blanco de agresiones y tienen todo el derecho, por no decir la obligación, de utilizar todos los medios disponibles (...) cuando están protegiendo no sólo la frontera, sino también su propia vida”, dijo Tusk.
Tusk y el ministro de Defensa, Władysław Kosiniak-Kamysz, dijeron que se enviarían policías y militares adicionales a la zona.
El gobierno proeuropeo de Polonia dice que la presión y la agresión asociadas a la migración ilegal van en aumento, un fenómeno orquestado por Rusia y Bielorrusia para desestabilizar a Europa mientras Moscú libra una guerra en Ucrania. Las autoridades polacas dicen que los grupos de migrantes son ahora principalmente hombres jóvenes, en comparación con las mujeres y niños que llegaban antes. En lo que va de año se han registrado más de 13.000 intentos de cruces ilegales, un incremento respecto al mismo periodo del año anterior.