Premier húngaro divulga carta a líderes de la UE detallando su “misión de paz” en Ucrania
El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, publicó el jueves una carta que dirigió a los gobernantes de países de la Unión Europea, en la que presenta sus impresiones sobre una serie reciente de visitas a algunos de los mayores adversarios del bloque, las cuales enfurecieron a muchos de sus aliados.
En la carta, enviada por Orbán el 12 de julio al presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, se describe su valoración de las reuniones que sostuvo bajo los auspicios de una autodenominada “misión de paz” que incluyó viajes este mes a Moscú y Beijing, lo que calificó como un intento de negociar el fin de la guerra de Rusia en Ucrania.
Dichas visitas provocaron una áspera reacción entre los líderes de la Unión Europea, quienes reprendieron a Orbán por reunirse con Vladímir Putin de Rusia y Xi Jinping de China sin consultar primero a sus socios europeos. También fue criticado por socavar la unidad de la Unión Europea con respecto a Ucrania y por dar la falsa impresión de que representaba al bloque.
En la carta de Orbán, compuesta por 10 puntos y que publicó el jueves en su sitio web, se indica que es poco probable que Putin y el presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, con quien también se reunió este mes, tomen iniciativas para lograr un cese al fuego o realizar negociaciones de paz para dar fin a la guerra.
Las partes en conflicto, escribió, “no comenzarán a buscar una salida al conflicto sin una participación externa importante”. Sugirió que la Unión Europea — a la que, junto con Estados Unidos y China, describe como las únicas potencias mundiales que pueden influir en el desarrollo del conflicto — “ha copiado la política en pro de la guerra de Estados Unidos”, y que debe romper con Washington y realizar esfuerzos para lograr un cese al fuego.
Desde hace tiempo, Orbán ha confundido a sus socios occidentales por establecer estrechos vínculos con Putin, una relación que se volvió más alarmante cuando Moscú inició su invasión total a Ucrania en 2022. También cabildeó vigorosamente en favor de las inversiones chinas y de una política económica más favorable a China, mientras la mayoría de los países de la Unión Europea buscan limitar la influencia de Beijing.