Presidente español y UE fustigan plan andaluz para humedales
El presidente del gobierno español y el comisario de medio ambiente de la Unión Europea fustigan el plan “ilegal” de legisladores de derechas para ampliar los derechos de agricultura en uno de los humedales más importantes de Europa en medio de una sequía prolongada
El presidente del gobierno español y el comisario de medio ambiente de la Unión Europea fustigaron el jueves un plan “ilegal” de legisladores de derechas para ampliar los derechos de agricultura en uno de los humedales más importantes de Europa en medio de una sequía prolongada.
El Partido Popular, de centroderecha, y el partido de extrema derecha Vox propusieron en marzo rezonificar la tierra alrededor del parque nacional Doñana en Andalucía y la legislatura regional respaldó el plan la semana pasada. Los detractores dicen que el proyecto constituye de hecho una amnistía para los agricultores que penetran ilegalmente en el acuífero de Doñana para cultivar fresas, arándanos y frambuesas para el mercado europeo.
El comisario de Medio Ambiente de la UE, Virginijus Sinkevičius, advirtió en una carta el jueves que el bloque apelará a “todos los medios disponibles” para asegurar que España acate un fallo de la Corte Europea de Justicia que la condenó por violar las normas de la UE sobre la extracción excesiva de agua de Doñana.
Desde entonces, la UE ha enviado advertencias reiteradas para asegurar el acatamiento de las normas ambientales, y la aprobación de derechos de riego para 800 hectáreas de tierra adicional en torno del sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO podría dar lugar a una multa abultada.
El presidente del gobierno español, el centroizquierdista Pedro Sánchez, visitó la zona, que es hábitat de especies en peligro como el lince ibérico. Sánchez exhortó a los políticos andaluces a “volver a la legalidad europea y frenar este atropello”. Les recordó que cualquier multa impuesta por la UE correría a cargo de los contribuyentes de toda España, y que algunos consideran el plan de Doñana un medio para obtener los votos de agricultores en las elecciones locales del 28 de mayo.
Los niveles de agua de las represas alimentadas por la cuenca del río Guadalquivir, donde se encuentra Doñana, están en el 25% de su capacidad luego de años de altas temperaturas y lluvias escasas. La cuota de agua para los agricultores de la región se ha visto reducida en más de un 30% en medio de la sequía más grave en Andalucía en casi tres décadas.
Ambientalistas españoles advirtieron este mes que la mitad de los lagos de la reserva natural han desaparecido, lo que amenaza la supervivencia de tortugas de agua fresca nativas de la península ibérica, además de libélulas y anguilas. Las imágenes de flamencos tambaleándose sobre el barro reseco y resquebrajado han provocado estupor en el país. El sitio es a la vez un lugar de tránsito para muchas especies de aves migratorias.
La tierra aledaña a Doñana se ha convertido en un importante centro para agricultores que en décadas anteriores pasaron de cultivos que requieren menos agua, como el olivo y los cereales, a frutos rojos sedientos para elevar sus ingresos.
Los agricultores que exigen derechos sobre el agua son dueños de tierras consideradas no irrigables en 2004, cuando se celebró un acuerdo para manejar la actividad de cultivo en torno de la reserva. Desde entonces, con el boom de los frutos rojos, han aparecido entre 1.000 y 1.200 pozos ilegales en las inmediaciones, de acuerdo con estudios del grupo ambientalista WWF.
El ministro español de Agricultura, Luis Planas, calificó el plan de riego de “ilegal” y dijo que los políticos prometían acceso a agua “que no existe en aquella zona”. La propuesta, añadió, daña la reputación de España entre sus socios comerciales, en particular Alemania, que compra el 30% de la cosecha española de fresas, arándanos y frambuesas.
Doñana "es nuestro patrimonio y, por tanto, este gobierno va a hacer todo lo que sea necesario para que esta iniciativa, como decía hace un momento, absolutamente incomprensible y absolutamente irracional, no se lleve a su fin", dijo Planas.