“La relación especial continúa”: Jill Biden elogia a Carrie Johnson, mientras Biden bromea que él y Boris se casaron “por encima de nuestras posibilidades”
“Es emocionante estar aquí. Estoy encantado de conocer a tu esposa”, dijo el presidente de Estados Unidos al primer ministro británico
La primera dama de Estados Unidos, Jill Biden, elogió a Carrie Johnson, esposa del primer ministro Boris Johnson, después de caminar juntas por la playa en Cornwall antes del inicio de la cumbre del G7.
“Fue maravilloso pasar un tiempo con Carrie Johnson y su hijo, Wilfred, hoy. La relación especial continúa”, tuiteó la Dra. Biden junto con una imagen de los tres caminando por la playa.
Tanto los Biden como los Johnson parecían ansiosos por volver a la normalidad en la relación entre Estados Unidos y el Reino Unido después de cuatro años impredecibles con Donald Trump en la Casa Blanca.
Si bien tanto Biden como Trump han comparado al primer ministro del Reino Unido con el ex presidente de los Estados Unidos en el pasado, y Biden ha dejado muy claro su descontento con el Brexit, tanto los líderes como sus esposas hicieron una demostración de armonía durante el inicio del primer viaje al extranjero de Biden como presidente.
Biden y Johnson intercambiaron cortesías frente a la prensa reunida el jueves. El primer ministro le dijo a su homólogo estadounidense que "todos" están "absolutamente emocionados de verte".
Biden respondió: “Es emocionante estar aquí. Estoy encantado de conocer a tu esposa". El primero ministro y su esposa se casaron a fines del mes pasado.
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Riendo, el presidente de Estados Unidos continuó: "Le dije al primer ministro que ambos tenemos algo en común: los dos nos casamos muy por encima de nuestras posibilidades".
Johnson, vacilando un poco, respondió: “Estamos de acuerdo. No voy a estar en desacuerdo contigo allí, o de hecho con cualquier otra cosa".
Carrie Johnson, de 33 años, es una ex funcionaria de prensa del Partido Conservador y la tercera esposa de Johnson.
Al llegar a la sede de la cumbre de Carbis Bay, Biden se volvió hacia la vista y dijo: "Es hermoso, no quiero volver a casa".