El papa Francisco sufre una crisis respiratoria “aislada” en el hospital, informa el Vaticano
Multitudes se reúnen fuera del hospital para expresar sus mejores deseos al líder católico de 88 años
El papa sufrió una crisis respiratoria “aislada” mientras recibe tratamiento en un hospital de Roma, informan desde el Vaticano.
El papa Francisco sufrió un espasmo bronquial el viernes que requirió ventilación mecánica, informó el Vaticano. La noticia denota un retroceso en su lucha de dos semanas contra una neumonía doble. El pontífice, de 88 años, respondió bien, con un buen nivel de intercambio gaseoso, y permaneció consciente y alerta en todo momento, aclaró el Vaticano en su actualización de última hora.
La noticia supuso un revés en lo que habían sido dos días sucesivos de informes cada vez más optimistas de los médicos que tratan a Francisco en el hospital Gemelli de Roma desde el 14 de febrero.
El episodio, ocurrido a primera hora de la tarde, provocó un “empeoramiento repentino del cuadro respiratorio”. Los médicos decidieron mantener su pronóstico como reservado.
El Vaticano ya hizo planes alternativos para el Miércoles de Ceniza de la próxima semana y dejó claro que a Francisco le queda un largo camino por delante. El cardenal Angelo De Donatis, funcionario del Vaticano y antiguo vicario de Roma, presidirá el 5 de marzo la ceremonia y procesión que inaugura el solemne tiempo de Cuaresma de la Iglesia, previo a la Pascua de abril.
A primera hora del viernes, Francisco había pasado la mañana alternando altos flujos de oxígeno suplementario con una mascarilla y rezando en la capilla. Había desayunado, leído los periódicos del día y estaba recibiendo fisioterapia respiratoria, explicó el Vaticano.
Los médicos no volvieron a referirse al estado de Francisco como “crítico”, una expresión que ha estado ausente de sus informes en los últimos tres días
En Ciudad de México, unas decenas de personas se reunieron el jueves por la noche en la catedral para rezar por la recuperación de Francisco.
“Es como parte de la familia”, dijo Araceli Gutiérrez, quien atesora la vez que vio al papa durante su viaje al país de casi 100 millones de católicos en 2016. “Por eso nos sentimos tan preocupados por él”.
María Teresa Sánchez, que estaba de visita desde Colombia con su hermana, dijo que siempre se ha sentido cercana a Francisco, el primer papa latinoamericano.
“Es como tener un pariente dentro de las altas esferas, con Dios”, dijo. “Ha hecho mucho por la religión; es una persona tan humilde”.
A pesar de sus mejoras, el próximo calendario de acontecimientos de Francisco se modificó: el Vaticano canceló una audiencia del Año Santo prevista para el sábado, y quedaba por ver si Francisco se saltaría su bendición del domingo al mediodía por tercera semana consecutiva.
Ahora que la ceremonia del Miércoles de Ceniza se delegó a un cardenal, los próximos acontecimientos importantes se producirán durante la Semana Santa y la Pascua, que este año cae el 20 de abril.
En años anteriores, cuando Francisco sufrió de bronquitis y gripe en invierno, frenó su participación en los eventos del Miércoles de Ceniza y la Semana Santa. Dichos días exigen que el papa esté al aire libre en el frío dirigiendo servicios, participando en procesiones y presidiendo oraciones en el periodo solemne en el que los fieles conmemoran la crucifixión y resurrección de Cristo.
Más allá de eso, Francisco tiene por delante algunos eventos importantes que al parecer esperaría mantener si se encuentra lo suficientemente bien.
El 27 de abril está previsto que canonice a Carlo Acutis, considerado el primer santo milenario y de la era digital.
El Vaticano considera al adolescente italiano, que murió de leucemia en 2006 a la edad de 15 años, una inspiración para los jóvenes católicos.
Otra cita importante es la conmemoración, el 24 de mayo, del 1700 aniversario del Concilio de Nicea, primer concilio ecuménico del cristianismo.
El líder espiritual de los cristianos ortodoxos del mundo, el patriarca Bartolomé I, invitó a Francisco a reunirse con él en Iznik (Turquía) para conmemorar el aniversario, que ha calificado de importante signo de reconciliación entre las iglesias católica y ortodoxa.
Antes de enfermarse, Francisco dijo que esperaba ir, aunque el Vaticano no ha confirmado el viaje.
Traducción de Michelle Padilla