Putin advierte sobre esfuerzos extranjeros para desestabilizar Rusia
Putin señaló la “llamada política de contención de Rusia”, alegando que incluye esfuerzos para “descarrilar nuestro desarrollo“
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ordenó el miércoles a la principal agencia de contrainteligencia del país que redoble sus esfuerzos para abordar lo que describió como intentos occidentales de desestabilizar el país.
Hablando en una reunión de altos funcionarios del Servicio Federal de Seguridad, o FSB, la principal agencia sucesora de la KGB, Putin señaló la "llamada política de contención de Rusia", alegando que incluye esfuerzos para "descarrilar nuestro desarrollo, frenarlo abajo, crean problemas a lo largo de nuestras fronteras, provocan inestabilidad interna y socavan los valores que unen a la sociedad rusa”.
El presidente ruso agregó que esas actividades de potencias extranjeras, que no nombró, tienen como objetivo "debilitar a Rusia y ponerla bajo control externo".
Las relaciones de Rusia con Occidente se han desplomado a mínimos posteriores a la Guerra Fría después de la anexión de Crimea de Ucrania por Moscú en 2014, la intromisión rusa en las elecciones presidenciales estadounidenses de 2016 y, más recientemente, el arresto del líder de la oposición rusa Alexei Navalny y una amplia represión de las protestas que exigen su liberación.
Navalny, el crítico más prominente de Putin, fue arrestado el 17 de enero al regresar de Alemania, donde pasó cinco meses recuperándose de una intoxicación por un agente nervioso que atribuye al Kremlin. Las autoridades rusas rechazaron la acusación y acusaron a Navalny de cooperar con agencias de inteligencia occidentales, afirmaciones que él ha ridiculizado.
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A principios de este mes, Navalny fue sentenciado a dos años y medio de prisión por violar los términos de su libertad condicional mientras convalecía en Alemania. La sentencia se deriva de una condena por malversación de 2014 que Navalny ha rechazado como fabricada y la Corte Europea de Derechos Humanos ha dictaminado que es ilegal.
El arresto de Navalny ha alimentado una ola de protestas que atrajo a decenas de miles a las calles de Rusia. Las autoridades han detenido a unas 11.000 personas, muchas de las cuales fueron multadas o condenadas a penas de cárcel que oscilan entre siete y 15 días.
A raíz de las manifestaciones, el parlamento controlado por el Kremlin endureció el castigo por desobedecer a la policía e introdujo nuevas multas por financiar manifestaciones. Putin firmó el miércoles esos nuevos proyectos de ley.
Sin nombrar a Navalny, Putin atacó a aquellos en Rusia que supuestamente sirven a intereses extranjeros.
“Es necesario trazar una línea entre la competencia política natural, la competencia entre partidos políticos, plataformas ideológicas, diversas visiones sobre el desarrollo del país y las actividades que no tienen nada que ver con la democracia y tienen como objetivo socavar la estabilidad y seguridad de nuestro Estado, en al servicio de los intereses extranjeros”, dijo.
El presidente ruso enfatizó la necesidad de que el FSB proteja las elecciones parlamentarias programadas para septiembre de cualquier "provocación".
Elogió a la agencia por interrumpir las actividades de espías extranjeros, diciendo que desenmascaró a 72 oficiales de inteligencia extranjeros y 423 de sus informantes.