Hombre que sufrió dolores de cabeza durante siete años diagnosticado con tumor cerebral tras cita en óptica
Matt Voice, de 40 años, dice que hoy no estaría vivo si no hubiera ido a la óptica
Un padre que sufrió dolores de cabeza durante siete descubrió que tenía un tumor cerebral en una cita oftalmológica de rutina y dice que no estaría vivo hoy si no hubiera ido.
Matt Voice, de 40 años, lidió con mareos desde los 32 y se preocupó cada vez más cuando comenzó a sufrir dolores de cabeza y problemas de visión.
En abril de 2020, lo llevaron al Worthing Hospital, West Sussex, Inglaterra, después de desmayarse en la entrada de su casa. Sin embargo, el incidente se atribuyó a la presión arterial alta.
Sin embargo, Matt no dejó de sufrir desmayos y dolores de cabeza insoportables. Hizo una cita con el optometrista después de que comenzó a ver “esferas negras”.
Lo remitieron a la clínica oftalmológica del Hospital Southlands, West Sussex, después de que detectaron que las cabezas del nervio óptico en ambos ojos parecían estar hinchadas.
Después de las pruebas, Matt se sorprendió porque le diagnosticaron astrocitoma glioma, un tipo de cáncer cerebral, en mayo de 2020.
Se hizo una craneotomía parcial, para extirpar el 70 por ciento del tumor en un lado de su cerebro. También se sometió quimioterapia y radioterapia y su cáncer ahora está bajo control.
Sufre pérdida de memoria a corto plazo, así como problemas con su movilidad y coordinación, lo que lo ha llevado a cerrar su negocio y regresar con su madre, Bev Gargate, de 64 años, enfermera a tiempo parcial.
Matt, quien solía trabajar como mecánico móvil técnico y es padre de Mason, de 11 años, y Darcy, de 15, dijo: “Si no hubiera presionado para mi cita con el optometrista, no estaría aquí hoy”.
“Me tomó por sorpresa cuando me dijeron que tenía cáncer de cerebro, no me lo esperaba en absoluto. Ha sido difícil para mis hijos verme así: aún soy su padre, pero me veo diferente”.
“Me han visto sufrir una convulsión que ningún niño debería tener que ver”.
“Es frustrante ahora que olvido cosas, incluso qué día o mes es. Ahora es solo un juego de espera para ver si el tumor crece”.
“Pero estoy muy contento de haber ido a Specsavers, esa cita pudo haberme salvado la vida. Conducía y tuve que detenerme porque mi visión se volvió borrosa y me sentí mal. Pero los médicos seguían diciendo que era mi presión arterial”.
“Como mi vista empeoraba, presioné para conseguir una cita con el optometrista. Casi se canceló debido al covid, pero presioné para ir”.
A Matt lo atendió por un optometrista en Worthing Specsavers, quien identificó que tenía papiledema, cuando detectaron sus discos ópticos inflamados, y lo remitió al hospital.
“Luego me vio un especialista en el hospital y me dijo que tenía una lesión en el cerebro”, relató Matt.
Luego lo remitieron a un consultor en Brighton Royal Hospital, Brighton, East Sussex, y se le diagnosticó astrocitoma glioma en mayo de 2022.
“Me dijeron que estaba en el lado izquierdo y derecho de mi cerebro y que se volvería agresivo”, añadió.
“Empecé a sufrir convulsiones y la vista se me nublaba”.
“Fue horrible para mis hijos, Mason, de 11, y Darcy, de 15, presenciarlo”.
Matt se sometió a una craneotomía parcial en julio de 2020, que implicó extirpar el 70 por ciento del tumor en el lado derecho, seguida de seis semanas de radioterapia extensa en agosto de 2020.
“La parte del tumor extirpada era del tamaño de un puño”, detalló Matt.
Se sometió a quimioterapia en enero de 2021, pero solo logró tres rondas de las ocho que tenía programadas porque lo enfermó demasiado.
“Perdí todo mi cabello y podía ver a los niños mirarme de manera diferente”.
“Aún soy su padre, pero ya no puedo hacer nada con ellos”.
“Ha cambiado todo”.
El cáncer de Matt ahora está bajo control, pero es probable que el tumor crezca, lo que significa que quizá necesite más tratamiento.
Hoy en día, sufre pérdida de memoria, movilidad y coordinación.
“Es frustrante”, comentó Matt.
“Trabajé toda mi vida como mecánico, así que estaba muy conectado [con lo que le rodeaba]”.
“Ahora me cuesta recordar algo que mi madre me acaba de decir o cuál es la fecha”.
“Tengo que tener un elevador para escaleras en casa y a los 40 años volví a vivir con mi madre”.
Matt ahora está en la etapa de “observar y esperar” para ver si el tumor crece.
“Es horrible esperar los resultados de la resonancia magnética para ver si ha crecido”, comentó.
“Solo tengo que rezar para que no lo haya hecho cada vez [que se hace la resonancia]”.
“Me alegro de haber ido a la óptica cuando lo hice; de lo contrario, no creo que estaría aquí para mis hijos”.
Denis Youngman, director optometrista de la tienda de Specsavers en Worthing, declaró: “Matthew vino a visitarnos en 2020, durante el primer confinamiento. Los servicios de urgencia hicieron una derivación a la cita de rutina en neurología, lo que lo habría hecho esperar semanas. Sin embargo, sentí que su caso justificaba un examen urgente en la tienda”.
“Durante el examen, encontré que su visión estaba reducida y, lo que es más importante, las cabezas del nervio óptico en ambos ojos parecían estar inflamadas. Esto se destacó en una de las dos máquinas OCT [tomografía de coherencia óptica] que tenemos en la tienda. Como resultado, lo remití de inmediato al departamento de oftalmología del Southlands Hospital”.
“Muchos de estos casos resultan ser presión intracraneal benigna, sin embargo, Matthew me llamó para informarme que era un tumor cerebral y que se planeaba una cirugía urgente”.
“Hace poco cito una cita para verme y puedes imaginar lo contento que estaba de ver a Matthew recuperarse”.