Yang Tengbo: el presunto espía chino y su conexión con el príncipe Andrés
Yang Tengbo asegura que no cometió “ningún delito” y califica las acusaciones de espionaje como “completamente falsas”
Yang Tengbo, el presunto espía chino, es el protagonista del más reciente escándalo que involucra al príncipe Andrés.
Este empresario de 50 años fue vetado de ingresar al Reino Unido en 2023, después de que las autoridades lo señalaran como una posible amenaza para la seguridad nacional.
Su identidad salió a la luz tras las intensas presiones de los parlamentarios, quienes exigieron que se revelara su información y desafiaron una orden judicial que protegía su anonimato.
Yang Tengbo afirma que no cometió “ningún delito” y describe las acusaciones de espionaje como “completamente falsas”.
A continuación, The Independent analiza quién es el empresario chino, las acusaciones en su contra y su conexión con la Familia Real.
¿Quién es el presunto espía chino Yang Tengbo?
Según se detalla en la sentencia, Yang nació en 1974, estudió en una universidad de China y trabajó varios años como funcionario de bajo rango.
En 2002 se trasladó al Reino Unido y estudió un máster en Administración Pública y Política Pública en la Universidad de York.
Tres años más tarde, Yang fundó una empresa de consultoría sobre inversiones en China, que posteriormente organizaría importantes eventos de alto nivel relacionados con ese país.
¿Cuáles son las acusaciones en su contra?
En 2021, Yang fue detenido en virtud de la Ley de Lucha contra el Terrorismo y Seguridad Fronteriza, tras lo cual se le solicitó entregar su teléfono móvil y su ordenador.
Según el Ministerio del Interior, se encontraron evidencias que vinculaban a Yang con el Departamento de Trabajo del Frente Unido (UFWD), una entidad asociada al Partido Comunista de China (PCCh).
A raíz de estas pruebas, la entonces ministra del Interior, Suella Braverman, le impuso una prohibición de ingreso al Reino Unido. No obstante, Yang impugnó esta decisión ante la Comisión Especial de Apelaciones sobre Inmigración.
¿Cuál es su relación con el príncipe Andrés?
El jueves, la Comisión Especial de Apelaciones sobre Inmigración desestimó el recurso de Yang e hizo público su caso.
En la sentencia, se citaban pruebas presentadas por el Ministerio del Interior que afirmaban que el empresario era una persona de confianza del príncipe Andrés y tenía la capacidad de actuar en su nombre ante inversores en China.
Informes posteriores revelan que Yang utilizó sus conexiones para obtener invitaciones al Palacio de Buckingham y otras residencias reales.
Asimismo, se reunió con David Cameron en una recepción en Downing Street y con Theresa May en un evento formal, de los cuales guardó fotografías. Según The Sunday Times, estos encuentros ocurrieron en los últimos 15 años.
En 2005, Yang fundó una empresa de consultoría especializada en inversiones en China, que posteriormente organizó diversos eventos de alto nivel relacionados con el país.
¿Qué postura adoptó Yang frente a las acusaciones?
Yang afirmó que no había hecho “nada malo ni ilegal” y agregó: “La descripción generalizada de que soy un ‘espía’ es totalmente falsa”.
Declaró: “Ante el alto nivel de especulación y desinformación en los medios y otros espacios, he solicitado a mi equipo legal que revele mi identidad. No hice nada incorrecto ni ilegal, y las acusaciones del Ministerio del Interior en mi contra carecen de fundamento. La etiqueta de ‘espía’ que se me ha atribuido es completamente falsa”.
Según explicó, había solicitado una revisión de la decisión del Ministerio del Interior y buscaba autorización para apelar el fallo del SIAC. También señaló que esta era la razón por la cual se le había otorgado una orden para extender su anonimato mientras se resolvía el proceso de apelación.
Asimismo, criticó el sistema bajo el cual se llevó su caso y señaló que lo excluyeron de la mayoría de las pruebas presentadas en su contra. Afirmó que el procedimiento, estructurado con pruebas secretas y sesiones cerradas, era “injusto” y lo comparó con “disparar a ciegas hacia un objetivo invisible”.
“Incluso los tres jueces que evaluaron mi caso concluyeron que ‘no había evidencia contundente’ en mi contra, que su decisión fue ‘difícil de tomar’ y que mis actividades podían tener una ‘explicación inocente’. Sin embargo, esta información ha sido desestimada por los medios”, expresó en su comunicado.
En cuanto al contexto político, denunció haber sido víctima de un cambio de enfoque en las relaciones internacionales. “Cuando las relaciones con China son favorables y hay interés en atraer inversión, soy bienvenido en el Reino Unido. Sin embargo, cuando esas relaciones se deterioran y predomina una postura crítica hacia China, me rechazan”, afirmó.
Se describió como un empresario “independiente” que forjó su propio camino y aseguró que su objetivo siempre fue crear asociaciones y “conectar Oriente con Occidente”. “Dediqué mi vida profesional en el Reino Unido a crear lazos entre empresas británicas y chinas. Mis actividades ayudaron a generar cientos de millones de libras en inversión para el Reino Unido”.
“Formé mi vida personal en el Reino Unido durante dos décadas y lo considero mi segundo hogar. Jamás actuaría en contra de los intereses del Reino Unido”, concluyó.
Traducción de Leticia Zampedri