Una disputa laboral paraliza las 2 mayores empresas de trenes de mercancías en Canadá
Las dos grandes compañías ferroviarias de mercancías de Canadá paralizaron sus operaciones debido a una disputa laboral con sus trabajadores, y los negocios temían más complicaciones si los trenes no reanudaban pronto sus servicios.
Las empresas Canadian National y CPKC iniciaron un cierre patronal después de que venciera el plazo límite de la medianoche del jueves sin nuevos acuerdos con la Teamsters Canada Rail Conference, que representa a unos 10.000 maquinistas, revisores y controladores.
Más de 30.000 usuarios habituales del transporte público en Vancouver, Toronto y Montreal tendrán que buscar otra forma de llegar a trabajar porque sus trenes no podrán utilizar las vías de CPKC mientas esté cerrada la compañía.
Los grupos empresariales han instado al gobierno a intervenir, pero el primer ministro, Justin Trudeau, se ha negado por el momento a obligar a las dos partes a iniciar un arbitraje.
CN dijo que estaba esperando una respuesta a su oferta final. El vocero de CPKC Patrick Waldron dijo que el sindicato había rechazado su última oferta, presentada personalmente por el director general, Keith Creel. Las dos firmas han ofrecido un arbitraje vinculante como forma de resolver la disputa.
Muchas empresas de todos los sectores dependen de los ferrocarriles para recibir materias primas y productos terminados, de modo que sin un servicio regular podrían tener que reducir su actividad o incluso cerrar. Puertos y centros de distribución de grano podrían verse sobrepasados con rapidez por cargamentos parados.
El gobierno estadounidense impidió que los trabajadores ferroviarios fueran a la huelga hace dos años y les obligó a aceptar un contrato pese a sus preocupaciones sobre horarios exigentes y la falta de baja por enfermedad pagada.
Todo el tráfico ferroviario en Canadá y todos los envíos que cruzan la frontera con Estados Unidos se han detenido, aunque los trenes de CPKC y Canadian National seguirán operando en Estados Unidos y México.
Aunque los trenes canadienses han registrado parones breves en el pasado durante sus negociaciones laborales, es inusual que las dos compañías cierren a la vez.
Las dos firmas han ido reduciendo sus operaciones de forma gradual desde la semana pasada. Los cargamentos de productos peligrosos o perecederos fueron los primeros en detenerse para evitar que quedaran varados a mitad de trayecto.
Mientras las negociaciones en Canadá se acercaban a su plazo límite, una de las compañías ferroviarias más grandes de Estados Unidos, rompió con la tradición estadounidense del sector de negociar de forma conjunta durante años con los sindicatos. CSX alcanzó un acuerdo con varios de sus 13 sindicatos que cubre al 25% de su personal antes de que comiencen las nuevas negociaciones este año.
Trudeau ha sido reacio a imponer un arbitraje porque no quiere ofender a los sindicatos, pero el miércoles instó a las dos partes a llegar a un acuerdo dado el enorme daño económico que supondría el cierre.
Las negociaciones están atascadas en cuestiones como la forma en la que se programan los turnos de trabajo y preocupaciones sobre los protocolos para evitar la fatiga y dar descansos adecuados al personal. Las dos compañías han propuesto abandonar el sistema actual, en el que los trabajadores cobran en función de la distancia recorrida, a un sistema por horas en el que dicen sería más fácil predecir las horas de descanso.
Las empresas han dicho que sus contratos ofrecen subidas salariales acorde a acuerdos recientes en el sector. Casi 10.000 trabajadores están sujetos a esos contratos.
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Funk informó desde Omaha, Nebraska.