Madre que denunció abducción por extraterrestres dice que Netflix la hizo quedar como una mentirosa en nueva docuserie
Exclusivo: Una mujer que afirma haber sido “abducida” por extraterrestres en 1989 ha presentado una demanda para impedir el lanzamiento de la serie documental ‘Abducción extraterrestre en Manhattan’. Alega que en la producción, que fue documentada por la exesposa “despechada” de un ufólogo fallecido, se la retrata como una mentirosa
Una neoyorquina, madre de dos hijos, que compartió su controvertida historia de una supuesta abducción extraterrestre en su apartamento en el centro, asegura que Netflix la retrata como una fabuladora en una próxima serie documental. Ahora, busca frenar su lanzamiento.
Linda Napolitano, quien inicialmente contó su experiencia bajo el seudónimo de Linda Cortile, afirma que en la madrugada del 30 de noviembre de 1989 fue secuestrada por tres seres grises y bípedos que la sacaron de la ventana de su apartamento en el piso 12 mediante un rayo de luz azul. Según Napolitano, estos extraterrestres la elevaron hasta una nave de color naranja rojizo que luego se dirigió rápidamente hacia el puente de Brooklyn.
Budd Hopkins, el fallecido artista e investigador de ovnis, defendió la historia de Napolitano en su libro de 1997, Witnessed: The True Story of the Brooklyn Bridge, lo que generó gran interés y, como era de esperar, también escepticismo. Hopkins afirmó que su convicción aumentó tras recibir una carta de dos guardaespaldas que aseguraban haber estado protegiendo a un “líder mundial” anónimo cuando vieron a una mujer flotando en el cielo dentro de una nave extraterrestre. Más de 20 testigos adicionales afirmaron haber presenciado también el supuesto secuestro de Napolitano.
Ahora, Napolitano, de 77 años, intenta impedir que Netflix publique su versión del supuesto incidente, Abducción extraterrestre en Manhattan, cuyo estreno está previsto para el miércoles. Según una impactante demanda obtenida por The Independent, Linda alega que en la serie, se muestra una postura escéptica y se examina cómo “engañó a Hopkins” en lugar de creer en sus afirmaciones.
“Una mujer afirma haber sido secuestrada en su dormitorio de Manhattan. Esta serie documental explora si todo fue un engaño elaborado... o una prueba de vida alienígena”, anuncia una promoción de Netflix.
En un correo electrónico, Napolitano expresó su gratitud y su aparente disposición a compartir más detalles sobre el caso, aunque añadió: “Mi abogado prefiere que no haga comentarios.” No obstante, compartió el correo electrónico y el número de teléfono de su abogado.
Cuando se lo contactó por teléfono el martes, el abogado declaró que era prematuro hacer comentarios en este momento. Netflix no respondió a la solicitud de comentarios y los intentos de contactar a Napolitano en su hogar en Tennessee, donde reside actualmente, no tuvieron éxito.
En su demanda, Napolitano alega que fue difamada en pantalla por la exesposa de Hopkins, a quien describe como “una mujer resentida y alcohólica, decidida a vengarse de su marido”.
Según la demanda presentada el lunes en el Tribunal Supremo del Estado de Nueva York, esta miniserie representaría “el último y agónico acto de venganza” de la mujer, destinado a “perjudicar” a su exmarido en lugar de revelar la verdad investigada y publicada en Witnessed.
También se menciona que a la exesposa de Hopkins le incomodaba que él ignorara los elementos que “desacreditaban” la historia de Napolitano. En 2011, ella publicó un artículo en el que refutaba la idea de las abducciones alienígenas y criticaba la metodología de investigación de Hopkins. En este contexto, psiquiatras que han estudiado el fenómeno sostienen que existen diversas razones por las cuales algunas personas creen haber sido abducidas por extraterrestres. Entre ellas se incluyen trastornos de personalidad con inclinación a la fantasía y, en el caso de sobrevivientes de agresiones sexuales, la creación de “recuerdos pantalla” que bloquean el trauma vivido.
Los productores londinenses de la producción, según argumenta la denuncia de Napolitano, aseguraron que tenían la intención de contar “la historia veraz del secuestro de Linda”, tal como se narra en las páginas del libro de Hopkins. Esta promesa llevó a Napolitano, quien se había mostrado reacia a aparecer en pantalla, a creer que “finalmente” se mostraría su versión de los hechos.
Sin embargo, Napolitano sostiene que fue engañada desde el principio. Los productores optaron por una versión diferente de la que ella había acordado y, en su lugar, presentaron a la exesposa de Hopkins como “una experta escéptica en este campo”. Su cuestionamiento de la versión de Napolitano solo sirvió para “ponerla en entredicho”, con un “diálogo guionizado” que respaldaba lo que, según ella, era una versión falsa. En la denuncia, también se menciona el “vestuario poco favorecedor y denigrante” que la neoyorquina tuvo que usar en pantalla.
Según las declaraciones de Napolitano, la expareja de Hopkins proporcionó a los cineastas sus documentos personales, notas y videos sobre el supuesto secuestro, pero también “falsificó una carta” en la que afirmaba que [Napolitano] había dicho que todo era un engaño. Sin embargo, Napolitano alega que la exesposa de Hopkins, quien falleció en 2023, le “robó” el material que tenía sobre su caso después de que ambos se separaran, aunque continuaron viviendo en la misma casa.
Napolitano afirma que jamás habría participado en el proyecto de haber sabido que los productores usarían “representaciones falsas” de lo que asegura que le ocurrió, aprovechándose de su falta de experiencia en producción cinematográfica para obtener su colaboración. Según se expresa en la denuncia, no sospechó nada hasta que un socio asistió a una proyección de la miniserie en el Reino Unido a mediados de septiembre.
En la denuncia, también se afirma que la serie la retrata “de forma grotesca e inusual”, con ropa poco favorecedora y ajena a su estilo, una apariencia envejecida y demacrada y un peinado distinto al suyo, lo cual la convierte en una caricatura, casi como “un personaje de dibujos animados”. Napolitano también expresó que la obligaron a seguir un guion que la muestra como mentirosa y se basa en una confesión que jamás realizó.
En su demanda, la presunta víctima de abducción sostiene que la han retratado como una “villana” para crear controversia y conflicto, en una narrativa que, según ella, la expondrá a la “vergüenza y el ridículo” y dañará su reputación de persona honesta que sufrió el secuestro. Alega que “solo” aceptó participar en el documental para que su experiencia se contara con veracidad por primera vez.
Napolitano alega difamación y fraude, y solicita daños punitivos y ejemplares que el tribunal determinará. Afirma que el resultado final es “rotundamente falso” y que los productores nunca tuvieron la intención de presentar un documental “basado en una historia real”. También califica la conducta de los responsables como “imprudente, fraudulenta, opresiva y despreciable” y advierte que, si la miniserie se estrena, “ninguna compensación” podrá reparar el daño a su reputación.
Napolitano solicita al juez que emita una orden para evitar que Netflix transmita Abducción extraterrestre en Manhattan, haga declaraciones públicas, emita comunicados de prensa sobre las razones de su cancelación o publique explicaciones en redes sociales.
Traducción de Leticia Zampedri