Países de la Unión Europea muestran su preocupación por acuerdo comercial que podría dañar el Amazonas
Francia mostró su rechazo y Alemania tiene dudas sobre el acuerdo.
Los países de la Unión Europea seguían divididos el lunes sobre un acuerdo preliminar de libre comercio redactado el año pasado con países sudamericanos debido a preocupaciones relacionadas con la deforestación del Amazonas y el respeto de las normas europeas.
Hablando antes de una reunión de los ministros de comercio de la unión de 27 naciones, el comisario europeo de mercado interior, Thierry Breton, dijo que “no todo el mundo está de acuerdo con este tema. Y definitivamente necesitaremos tener más discusiones entre nosotros”.
Tras dos décadas de negociaciones, el pacto comercial fue anunciado el año pasado por la Comisión Europea, el órgano ejecutivo de la UE. El acuerdo preliminar, que debe ser ratificado por todos los países de la UE, fue alcanzado con el bloque Mercosur, formado por Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay.
Los signatarios elogiaron pacto al decir que integraría un mercado de unas 800 millones de personas, eliminaría la mayoría de los aranceles a las exportaciones de la UE, facilitaría los controles fronterizos, reduciría la burocracia y fortalecería los lazos políticos y culturales.
Sin embargo, el organismo de control independiente de la UE inició en julio una investigación sobre el acuerdo después de que una ONG dijo que la comisión ignoró sus obligaciones legales de garantizar que el acuerdo no causaría ningún daño social, económico o ambiental, ni conduciría a abusos de derechos.
Francia dijo la semana pasada que sigue oponiéndose al acuerdo en su forma actual. La canciller alemana, Angela Merkel, también expresó dudas este verano, citando preocupaciones sobre la deforestación.
El gobierno francés dijo que el pacto debe mejorarse para asegurarse de que esté en línea el acuerdo de París de 2015 sobre calentamiento climático, que no contribuya a una mayor deforestación y que los productos agrícolas importados cumplan con los estándares de salud y ambientales.
Irlanda también ha criticado el acuerdo, mientras que Luxemburgo quiere que se modifique el texto para garantizar que los bosques tropicales del Amazonas no se vean dañados. “Necesitamos compromisos tangibles para proteger el medio ambiente y luchar contra la deforestación”, dijo canciller Jean Asselborn.
AP