PolyMarchs mantiene el baile y la energía en la Ciudad de México
El colectivo mexicano de DJs PolyMarchs ha llevado géneros como high energy e Italo Disco a las pistas de baile desde hace 48 años, han ido de gira a Estados Unidos y se han presentado en el Zócalo de la Ciudad de México en dos ocasiones, nada mal para una fiesta iniciada por un joven que construía sus propias bocinas y luces
El colectivo mexicano de DJs PolyMarchs ha llevado géneros como high energy (también estilizado Hi-NRG) e Italo Disco a las pistas de baile desde hace 48 años, han ido de gira a Estados Unidos y se han presentado en el Zócalo de la Ciudad de México en dos ocasiones, nada mal para una fiesta iniciada por un joven que construía sus propias bocinas y luces.
Antes de su presentación en la capital mexicana este fin de semana, sus integrantes actuales conversaron sobre su legado musical. PolyMarchs surgió en la década de 1970 cuando el director Apolinar Silva de la Barrera tenía deseos de llevar música a la gente.
Silva es originario de Puerto Ángel, en el estado sureño de Oaxaca. Se mudó a la capital mexicana para estudiar la secundaria y permaneció en la ciudad, pues ingresó al Instituto Politécnico Nacional.
“Cuando empecé en esto tenía una pequeña consolita”, dijo en una entrevista reciente. “Si mi mamá supiera...”, agregó sobre lo mucho que ha crecido su proyecto para el que en un principio hacía sus luces con usando frascos de crema corporal y papel aluminio y con el que se presentaba muchas veces sin cobrar.
El nombre de PolyMarchs proviene del apodo de Silva “Poly”, el de su hermana “Mary” y el de su hermana Elisa, “Lichi”, del cual tomaron la “ch” y al que agregaron la S de su apellido. Mary trabajaba como secretaria cuando surgió el proyecto y solía darle dinero a Silva para que fuera comprando equipo. Silva también hacía sus propias bocinas y las vendía, de esa manera también ganaba dinero para sus presentaciones.
“Cuando se juntaron hicieron un corto, hicieron una chispa, y esa chispa se quedó prendida y es lo que lo ha mantenido”, dijo el DJ Víctor Estrella. “Estamos muy, muy orgullosos, en lo personal de ser parte de esta familia, porque ante todo somos una familia y eso es lo que ha mantenido a flote a PolyMarchs por muchos años”.
Con el tiempo, Silva dejó de mezclar y su sobrino Tony Barrera tomó el papel de DJ, locutor de las fiestas y arreglista. A su muerte, hace unos 25 años, cambió la alineación e ingresaron Estrella y el MC, o locutor, Abel Rodríguez. Ambos conocían a PolyMarchs desde su adolescencia y tuvieron que pasar por un proceso de selección implementado por Silva.
“Nuestra finalidad es hacer bailar bien a la gente, que quede contenta”, dijo el director sobre la meta del PolyMarchs. “Que la gente se sienta feliz bailando”.
Las primeras fiestas se hacían en Tlatelolco. Años después de que explotara su popularidad a finales de la década de 1970 y 1980 llegaron hasta el Palacio de los Deportes y al Zócalo de la Ciudad de México en dos ocasiones a comienzos de la década del 2000. Su producción actual requiere unos cuatro tráilers para transportar su equipo. Se han presentado de gira por todo México y Estados Unidos.
“En Chicago estábamos en concierto y al lado estaba Kiss y sus técnicos cuando fueron a ver eso dijeron ‘¿qué es PolyMarchs?’”, dijo Rodríguez. “Siempre viaja todo el equipo, lo que se presenta aquí va para allá y la gente sí se da cuenta, no la puedes engañar”.
Su estilo musical ha ido evolucionando, ahora no sólo es la música de los 70 y 80 con la que se dieron a conocer. De igual manera su público abarca diversas generaciones, de padres, que comenzaron yendo a sus fiestas cuando eran jóvenes, a sus hijos, quienes en muchas ocasiones van con ellos. También tienen redes sociales y suelen subir videos de sus conciertos.
Este fin de semana se presentarán en el foro Sala de Armas de la Ciudad de México con el astro del Italo Disco Fred Ventura. Adelantaron que colocarán una pista de baile especial.
“Tenemos nuestro talento, hacemos bailar, sentir, disfrutar, vibrar a la gente, como cualquier artista”, dijo Estrella.
Silva tiene ahora 65 años, no toma y no fuma. “Mi único vicio es el PolyMarchs”, dice. Para el 50 aniversario se imagina volver al corazón de la capital.
“Soy acervo cultural de la nación y necesito la plaza del Zócalo”, dijo Silva.