Vladimir Putin hizo que médicos corrieran a su lado luego de quejarse de “náuseas severas”, según un informe
La emergencia médica duró unas tres horas y los médicos se fueron después de que su condición mejorara
Los médicos de Vladimir Putin acudieron de urgencia a su cama durante el fin de semana después de que se quejara de “náuseas severas” durante un susto de salud nocturno, según un informe.
El presidente ruso de 69 años requirió “atención médica urgente”, lo que obligó a su equipo de paramédicos a llamar a médicos adicionales para una emergencia médica que duró unas tres horas, afirmó el popular canal ruso Telegram General SVR.
“Putin en la noche del viernes 22 de julio al sábado 23 de julio necesitó atención médica urgente”, informó el canal. “Alrededor de la 1 am, a los trabajadores médicos de guardia en [su] residencia los convocaron ante el presidente”.
“Putin se quejó de fuertes náuseas”.
“Veinte minutos después, se llamó a un equipo adicional de médicos con los médicos tratantes del presidente”, añadió el canal.
Según los informes, la condición de Putin mejoró después de recibir asistencia médica.
The Independent no pudo verificar las afirmaciones hechas por el canal Telegram, supuestamente dirigido por un exteniente general del SVR (Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia), quien utiliza el seudónimo “Viktor Mikhailovich”.
El canal también afirmó que en las próximas semanas Putin “será reemplazado por un doble” e incluso que la tecnología deep fake (falsificaciones hechas por computadora) podría usarse para los próximos eventos.
Las especulaciones de que Putin sufre dolencias solo se han intensificado desde que Rusia invadió Ucrania. Varias apariciones públicas y reuniones oficiales hace algunos meses mostraron al presidente con el rostro hinchado, temblando y tambaleándose.
El líder, quien cumplirá 70 años a fines de este año, provocó rumores sobre su mala salud cuando se le fotografió mientras tosía y se acurrucaba bajo una manta en el desfile del Día de la Victoria de Rusia en mayo.
Las últimas afirmaciones sobre su mala salud se dan después de que el director de la CIA, William Burns, desestimara la especulación la semana pasada de que el líder ruso padece cáncer o enfermedad de Parkinson.
Al hablar en el Foro de Seguridad de Aspen en Colorado, Burns dijo: “Hay muchos rumores sobre la salud del presidente Putin y, por lo que sabemos, está bastante saludable”.
Por otra parte, el Kremlin también declaró el jueves que Putin gozaba de buena salud y descartó lo que llamó informes falsos de que no se encontraba bien.
“Todo está bien con su salud”, comentó el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, en respuesta a una pregunta en su sesión informativa diaria.
“Sabes que los especialistas en información ucranianos, estadounidenses y británicos han lanzado varias falsificaciones sobre el estado de salud del presidente en los últimos meses, no son más que falsificaciones”, agregó.
En un inusual viaje al exterior, Putin visitó Irán para reunirse con los líderes turco e iraní el 19 de julio. Esta fue su segunda visita fuera de Rusia desde la invasión de Ucrania.
Se reunió con el líder supremo de Irán, Ali Khamenei, y el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, para una cumbre en la que las potencias de Eurasia y Medio Oriente discutieron la guerra en curso en Siria, un posible mecanismo para exportar granos de Europa del Este a través de las líneas de batalla del Mar Negro y otros asuntos de seguridad regional.