Controvertida redada de SWAT deja a un bebé herido después de caerse de un coche policial

El Departamento de Policía de Pensacola inició una investigación después de que los padres alegaran que un niño resultó herido bajo su custodia tras el allanamiento en una residencia privada.

La policía abrió a la fuerza la casa de Corey Marioneaux Jr. en Florida temprano en la mañana, mientras sus dos hijos pequeños, de uno y tres años, estaban en casa en la cama.

Marioneaux, de 24 años, disparó a los oficiales durante la redada de febrero, que se llevó a cabo en relación con un tiroteo en Pensacola en enero. La familia afirma que el padre actuó en defensa propia y que pensó que los oficiales eran intrusos.

Moiya Dixon, la madre de los niños, vive en otra dirección y recibió una llamada después de la redada. “Cuando recibí a mi bebé, vi su rostro y era casi irreconocible en comparación con su aspecto la última vez que lo dejé”, dijo a Local12 News.

La foto de su hijo de un año que tomó después del incidente muestra su cara magullada y raspada, con un labio hinchado y protuberancias en la frente.

La lesión supuestamente ocurrió cuando ambos niños estaban en el asiento trasero de un automóvil con un investigador. Dicho investigador salió del vehículo y cuando regresó no se dio cuenta de que el niño más pequeño estaba apoyado contra la puerta. El oficial abrió la puerta y el niño se cayó.

“Los servicios médicos de emergencia revisaron al niño en busca de lesiones. Posteriormente, ambos niños fueron entregados a miembros de la familia”, dijo el Departamento de Policía de Pensacola en un comunicado al Canal 3 de ABC. Al ver las heridas de su hijo, Moiya Dixon lo llevó inmediatamente al hospital, donde los médicos confirmaron una variedad de lesiones.

Local12 informó que el jefe de policía de Pensacola, Eric Randall, se disculpó con Moiya Dixon por la lesión de su hijo y se comprometió a investigar el asunto.

Marioneaux comparecerá por primera vez ante la corte por cargos de intento de asesinato de un oficial de policía el 24 de febrero. La familia afirma que es propietario de un arma con licencia, sin antecedentes penales, y que estaba protegiendo a su familia de personas que ingresaran a su casa.

La policía dijo a los periodistas que anunciaron que estaban en la propiedad durante “aproximadamente 10 segundos” antes de ingresar por la fuerza a la residencia.

“No era un delincuente convicto, no era una persona de interés”, dijo Marcus Lett, pariente de Marioneaux, al Canal 3 de ABC. El pastor LuTimothy May dijo que Marioneaux era una influencia positiva en la comunidad local y se ofrecía como voluntario en la iglesia y en las organizaciones locales.

“El joven, una vez que se enteró de que era la policía, soltó el arma, salió con las manos en alto”, dijo el pastor May.

“¿Cómo podemos avanzar para asegurarnos de que esto no le suceda a otro joven inocente que está haciendo lo mejor que puede para criar a sus dos hijos?” preguntó el pastor May.

Marioneaux fue liberado de la custodia policial con una fianza de US$50.000.