¿Por qué Rusia exige el pago en rublos del gas que provee a Europa?
Europa se encuentra frente a uno de sus peores escenarios, la posible escasez energética si Rusia decide cortar el suministro de gas y petróleo
Esta semana se dio a conocer la decisión de Rusia de suspender la entrega de gas a Polonia y Bulgaria debido a que ambos países se negaron a pagar el hidrocarburo en rublos, moneda oficial del gigante euroasiático. Otros países se encuentran ante la misma disyuntiva de mantener el suministro del gas o sumir a Rusia en una de las peores crisis económicas de su historia.
La exigencia de Vladimir Putin, según varios analistas, tiene dos objetivos. El primero es evitar la devaluación de su moneda frente a las sanciones económicas que enfrenta a causa de la invasión a Ucrania. La segunda, es romper la unidad europea que, hasta el momento, se ha presentado como un solo frente contrario a Rusia.
La condición para seguir suministrando gas a los países europeos, que dependen de éste para mantener la industria y resistir el frío, es abrir una cuenta en rublos en el Gazprombank con sede en Suiza, en lugar de pagar en euros o dólares como hasta hace un par de meses.
"No deben acceder a las demandas rusas. Sería un incumplimiento de las sanciones y un alto riesgo para las empresas", advirtió la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen en una breve rueda de prensa después de que Gazprom cortara el suministro a Polonia y Bulgaria.
Esto, debido a que diversos medios como el Financial Times, revelaron que los distribuidores de Alemania, Austria, Hungría y Eslovaquia consideran ceder a las demandas de Putin.
Tan solo este interés está levantando ya la divisa rusa, que alcanza máximos no vistos desde noviembre de 2021, superando la fuerte caída que sufrió los primeros días del conflicto e, incluso, el nivel previo a la guerra.
Por su parte, el gobierno de Hungría ya confirmó que pagará con rublos sus importaciones de petróleo y gas. El ministro de Exteriores húngaro, Peter Szijjarto, defendió la decisión en una entrevista para CNN con el argumento de que "el 85% del suministro de gas" y "el 65% del suministro de petróleo" llegan desde Rusia.
"¿Por qué? Está determinado por la infraestructura. No es por diversión, no hemos elegido esta situación", dijo el funcionario quien también destacó que no hay alternativas que permitan a Budapest cortar su dependencia de hidrocarburos rusos.
El decreto por el que Vladimir Putin exigió que el pago del suministro de gas se realice en rublos entró en vigor el pasado 1 de abril y deja a Europa frente a la posibilidad de perder más de un tercio de su suministro de gas, materia prima para la industria, la energía y el consumo particular.
"¿Qué está pasando realmente? Hemos suministrado a los consumidores europeos nuestros recursos, en este caso gas. Lo recibieron, nos pagaron en euros, que luego ellos mismos congelaron. En este sentido, hay muchas razones para creer que entregábamos parte del gas suministrado a Europa prácticamente gratis", aseguró Putin.