Nuevos hallazgos científicos podrían evitar la “bomba de tiempo” del cáncer de mama
Una investigación financiada por Breast Cancer Now y publicada en la revista Nature Cancer descubrió cómo se forma el cáncer de mama secundario y cómo se puede prevenir
Científicos idearon una estrategia que podría evitar que el cáncer de mama regrese en otra parte del cuerpo de un paciente años o décadas más tarde.
En lo que los expertos han descrito como una “bomba de tiempo”, los pacientes con el tipo de cáncer de mama más común —receptor de estrógeno positivo (ER+)— tienen un riesgo continuo de que su cáncer vuelva a aparecer y de que se formen tumores incurables, como cáncer de mama secundario o metastásico.
Ahora, una investigación financiada por Breast Cancer Now y publicada en la revista Nature Cancer descubrió cómo ocurre este proceso en los pulmones a través de cambios moleculares que ocurren durante el envejecimiento.
Según los hallazgos, si una proteína que está presente en los pulmones, la proteína PDGF-C, aumenta, un proceso con altas probabilidades de que suceda durante el envejecimiento, puede hacer que las células cancerosas latentes crezcan y se conviertan en cáncer de mama secundario.
En un experimento con ratones con tumores ER+, los investigadores dirigieron la proteína con un medicamento existente llamado imatinib para ver si afectaría el crecimiento del cáncer.
Los ratones fueron tratados con el fármaco antes y después de que se desarrollaran los tumores. Según el estudio, para ambos grupos, el crecimiento del cáncer en el pulmón se redujo de forma significativa.
La Dra. Frances Turrell, becaria de formación posdoctoral en la División de Investigación del Cáncer de Mama del ICR (Instituto de Investigación del Cáncer) de Londres, dijo: “Descubrimos cómo el tejido pulmonar envejecido puede desencadenar estas células cancerosas para que se ‘reaviven’ y conviertan en tumores, y encontramos una estrategia potencial para ‘desactivar’ estas ‘bombas de tiempo’”.
“Ahora planeamos desentrañar mejor cómo los pacientes podrían beneficiarse del fármaco existente imatinib y, a largo plazo, nuestro objetivo es crear tratamientos más específicos que combatan el mecanismo de ‘reavivación’”.
El Dr. Simon Vincent, director de investigación, apoyo e influencia en Breast Cancer Now, agregó: “Este emocionante descubrimiento nos acerca un paso más a comprender cómo podemos ralentizar o detener el desarrollo del cáncer de mama secundario ER+ en el pulmón”.
“Tiene el potencial de beneficiar en el futuro a miles de mujeres que viven con esta ‘bomba de tiempo’, asegurando que menos pacientes reciban las noticias devastadoras de que la enfermedad se propagó”.
Hasta el 80% de los cánceres de mama primarios son ER+ y representan unos 44.000 casos en el Reino Unido cada año.
Rachel Davies, de 38 años, que vive en Swansea, fue diagnosticada con cáncer de mama ER+ en 2021 y se sometió a una mastectomía, extirpación de ganglios linfáticos, quimioterapia y radioterapia.
Después de una exploración en mayo de 2022, tres meses después de terminar el tratamiento, le dijeron que el cáncer se había extendido al esternón y luego a la columna, y ahora está recibiendo un medicamento contra el cáncer llamado ribociclib y terapia hormonal.
Davies dijo: “He visto a algunas mujeres terminar el tratamiento y celebrar que terminó, y esto siempre me preocupa, ya que nunca puedes estar en paz porque no volverá”.
“Descubrir que el cáncer se había propagado cuando pensaba que todo era cosa del pasado fue desgarrador”.
“Es por eso que es tan importante que se realicen investigaciones sobre el cáncer de mama secundario para encontrar nuevas formas de evitar que las mujeres pasen por lo que estoy enfrentando”.
Agregó: “Investigaciones como esta me dan esperanza para que las mujeres reciban tratamiento para el cáncer de mama en el futuro. No quiero perder mi precioso tiempo amargada ni enojada”.
Traducción de Michelle Padilla