Hombre atribuye a cambio de dieta y a crema para la piel de tan solo $20 como cura de su psoriasis
Scot Cunningham dice que se convirtió en un “ermitaño” después de sufrir la enfermedad en la piel
Un miembro del Consejo de las Artes que “se convirtió en un ermitaño” después de despertarse y encontrar su cara y su cuerpo cubiertos de manchas rojas y escamosas del tamaño de una gota no puede esperar para celebrar el Manchester Pride Parade este fin de semana, después de que una “crema milagrosa” de tan solo US$23 y un cambio de dieta curaran su piel de aspecto irritado.
El escocés Cunningham, de 27 años, quien gozó de una tez clara durante toda su adolescencia, empezó a padecer una leve psoriasis - una enfermedad de la piel que provoca manchas escamosas en los brazos y el torso cuando cumplió 21 años.
Las cremas con esteroides mantuvieron a raya los leves brotes hasta octubre de 2021, cuando Scot, de Salford, Greater Manchester, Inglaterra, se despertó y descubrió que todo su cuerpo y su cara estaban cubiertos de antiestéticas manchas rojas que picaban y que no cedían.
En abril de 2022, Scot relata que cambió las cremas con esteroides por una dieta basada en plantas y un remedio de venta libre que costaba apenas US23: “Ver mi cara despejada me hizo llorar de felicidad”.
Y añadió: “Me sentí en la cima del mundo y como mi yo alegre, divertido y descarado de nuevo”.
Cuando Scot empezó a padecer psoriasis en octubre de 2017 mientras estudiaba su maestría en creación de guiones de radio y televisión en la Universidad de Salford, no pensó mucho en ello.
Dijo: “Acababa de mudarme a mi residencia de estudiantes y al salir de la regadera noté dos o tres manchas rojas en mi torso”.
“Supuse que era el ambiente sucio en general lo que hacía que mi piel reaccionara”.
Cuando acudió al médico de cabecera, le recetaron cremas con esteroides para aliviar los parches de piel seca, que al principio funcionaron.
Señaló: “Las cremas funcionaron, pero cuando recuerdo, creo que solo cubrían el problema en lugar de solucionarlo”.
“Entré en el mismo ciclo de usar las cremas con esteroides cuando mi piel estaba mal durante dos semanas, viendo cómo desaparecían las marcas, y luego usando una crema hidratante normal durante dos semanas. Luego la piel se ponía mal y volvía a usar las cremas”.
“Era un círculo vicioso, pero en ese momento solo era un inconveniente menor”.
Scot añadió: “Mi piel no me causaba dolor físico y no se veían los parches con la ropa puesta, así que podía seguir trabajando, socializando y teniendo citas sin sentirme cohibido”.
Pero entonces, en octubre de 2021, Scot, que está soltero, enfermó de una infección de garganta, y unos días más tarde se despertó con pequeñas manchas rojas y escamosas por todo el cuerpo.
“Parecía que había ocurrido de la noche a la mañana”, explicó.
“Había docenas de escamas rosas del tamaño de una gota de agua por todo mi cuerpo. Estaba muy asustado. No tenía ni idea de lo que había pasado”.
Al volver al médico de cabecera, a Scot le diagnosticaron psoriasis guttata - una enfermedad de la piel que provoca pequeñas llagas en forma de gota en el pecho, los brazos, las piernas y el cuero cabelludo - y le recetaron más cremas con esteroides.
Pero esta vez no funcionaron, según Scot, quien comentó: “Las cremas parecían dejar de funcionar, pero siempre que veía a alguien, me decían que eran mi única opción”.
“Siempre me había sentido agradecido por mi aspecto juvenil y siempre llamé la atención en las apps para citas, aunque ahora empecé a perder toda la confianza en mí mismo. Tenía esta horrible sensación de temor cada vez que me miraba en el espejo: me veía horrible. Me sentía totalmente abatido y sin esperanza”.
Cuando las llagas empezaron a extenderse a la cara de Scot en marzo de 2022, dejó de salir.
Señaló: “Me convertí en un ermitaño”.
“Apagué mi cámara durante las reuniones de equipo en el trabajo y dejé de organizar encuentros con amigos, porque no quería que me vieran”.
“Si tenía que ir al supermercado, veía a todos los niños mirándome y me hacía sentir muy mal”.
Y añadió: “Una vez fui a un puesto de periódico y me preguntaron si tenía una enfermedad y me sentí mortificado. Pensé: ‘No volveré a comprarles mis productos de primera necesidad’”.
Al acudir al centro de tratamiento urgente del Manchester Royal Infirmary, a Scot le recomendaron una terapia de luz privada - que suele utilizarse para tratar la psoriasis - pero se enfrentó a una lista de espera de 60 semanas en el NHS.
Le recetaron otra crema y antihistamínicos, que no surtieron efecto, y decidió tomar cartas en el asunto: “Llegó el mes de abril y pensé: ‘Ya no puedo lidiar con esto’”.
Scot añadió: “Empecé a investigar sobre la psoriasis guttata durante horas todas las noches -desde las 5:30 después del trabajo hasta las 2 de la madrugada- tratando de entender la enfermedad y cómo mejorarla”.
Hablando con otros enfermos en foros sobre la piel y analizando la investigación, Scot se impuso un nuevo régimen, empezando por su dieta.
Dijo: “Antes de empezar esto, nunca comía mucha fruta y verduras. Vivía a base de comidas preparadas -sobre todo pasta y cenas con pollo- y cualquier cosa de chocolate que pudiera conseguir”.
“Empecé con una limpieza de jugos de manzana, pepino y apio de la empresa de cuidado natural de la piel, Hanna Sillitoe, durante tres días y luego empecé a hacer sopas y cenas sin lácteos, sin carne y sin gluten”.
Y añadió: “Tomaba cosas como sopa de manzana y betabel, sopa de chirivía y zanahoria o risotto de guisantes y albóndigas de setas”.
Al mismo tiempo, Scot empezó a tomar suplementos que incluían vitamina D3, zinc, omega-3 y magnesio, además de explorar las cremas hidratantes sin plástico.
Relató: “Encontré Balmonds Skin Salvation tras leer recomendaciones y compré el tarro de 120 ml por tan solo $23 para la cara y poco a poco empecé a notar la diferencia”.
“En mi cuerpo, empecé a usar otra crema, así como a ponerme aceite de coco y aceite esencial de cúrcuma por la noche”.
Junto con la nueva dieta de Scot, poco a poco, empezó a ver la diferencia.
Comentó: “Me advirtieron que durante los primeros días, a veces puede empeorar antes de mejorar, lo que hizo brevemente”.
“Luego, al cabo de un mes, las manchas empezaron a hacerse más pequeñas y menos rojas”.
Al recuperar la confianza en sí mismo, Scot decidió acompañar a unos amigos de vacaciones en Gran Canaria (España) en junio, donde notó una enorme diferencia.
Añadió: “Cada día había ido mejorando y al estar en el mar y tomarme un tiempo, al final de los 10 días, mi cara y mi cuerpo parecían casi limpios”.
“No me lo podía creer, me sentía increíble”. Mientras se permitía reintroducir en su dieta algo de carne blanca y pescado, Scot continuó con su nueva afición a las frutas y verduras y mantuvo su estricto régimen de cuidado de la piel, empezando por fin a llenar su agenda social de nuevo a medida que su cutis mejorado le devolvía la confianza: “Volví a salir de fiesta con amigos en junio y fue increíble, bailé toda la noche y me sentí fabuloso”.
Y añadió: “También he vuelto a las apps para citas y me siento mucho más seguro”.
“Y con la llegada del Manchester Pride este fin de semana de agosto, Scott no puede esperar a disfrutar de la celebración con sus amigos sin preocuparse por su piel”.
Dijo: “Muero por estar con mis amigos y sentirme bien conmigo mismo, sabiendo que estoy más sano y feliz por dentro y por fuera”.