Texas: un famoso pastor evangélico se aparta de la Iglesia por haber pecado

Tras dedicarse 48 años a predicar la palabra de Dios, el pastor de una importante iglesia de Texas ha anunciado que abandonará la institución que él mismo ayudó a fundar por haber cometido un pecado.

Según la información obtenida por el medio estadounidense NBC DFW, el Dr. Tony Evans (74) fue la primera persona afroamericana en obtener el título de doctor en Teología emitido por el Seminario Teológico de Dallas y, luego, fundó la iglesia Oak Cliff Bible Fellowship en el sur de Dallas en 1976 con su amigo, el reverendo Crawford Loritts.

Originario de Baltimore, Evans comenzó con la iglesia impartiendo clases de estudio de la Biblia en la sala de estar de la casa que compartía con Lois, su difunta primera esposa, a las que asistían solo 10 fieles.

Durante el siguiente medio siglo, Oak Cliff atrajo a más de 10.000 personas y la comunidad ahora cuenta con más de 100 ministerios. Además, el pastor tiene su propio programa radial sindicado The Alternative with Dr Tony Evans y fue también el capellán de los Dallas Cowboys de la NFL, y de los Dallas Mavericks de la NBA.

En 2019, enviudó cuando la madre de sus cuatro hijos falleció de cáncer en las vías biliares, pero el año pasado se volvió a casar con una docente llamada Carla Crummie y todo parecía marchar bien hasta que realizó una inesperada declaración el domingo 9 de junio, en la que manifestó su intención de renunciar por haber pecado.

“El pilar de nuestro ministerio siempre ha sido nuestro compromiso con la palabra de Dios como norma suprema absoluta vinculada con la verdad, la cual debemos cumplir durante toda nuestra vida”, escribió Evans en un comunicado.

Y agregó: “Cuando no la cumplimos y pecamos, debemos mostrar arrepentimiento y reconstruir nuestra relación con Dios. Hace algunos años, yo mismo no hice lo que debía. Por lo tanto, es mi obligación reconocer mi comportamiento y reparar mi vínculo con Dios, tal como lo han hecho otras personas”.

Asimismo, explicó que contaba con el apoyo de su familia y que, si bien no había cometido ningún crimen, no había actuado con rectitud.

En consecuencia, manifestó que se retiraría de su labor pastoral y, bajo la dirección de los presbíteros, se sometería a un proceso de sanación.

Por último, finalizó: “Los amo más que nunca, y confío en Dios para que me guíe durante este proceso”.

Aunque el pastor no especificó cuál es la culpa con la que carga, ni cuánto se prolongará su ausencia, en un segundo comunicado de la organización religiosa señalaron: “Luego de rezar fervientemente y de reunirnos varias veces con los presbíteros y el Dr. Evans, hemos tomado una difícil decisión”.

Luego, continuaron: “La junta presbiteriana debe dirigir la iglesia de acuerdo con las Sagradas Escrituras. Cuando el comportamiento de cualquier miembro no está a la altura de los principios bíblicos, los presbíteros son responsables de tomar medidas al respecto y velar por la integridad de la iglesia, y eso es algo que el Dr. Evans como los presbíteros aceptamos”.

En el sitio web de la institución, le dedicaron unas palabras y lo catalogaron como “uno de los pastores más respetados del país dentro de la comunidad evangélica”. Además, destacaron su capacidad para comunicar la palabra de Dios de una manera sencilla, pero reflexiva.

Por otro lado, en un artículo del periódico Christianity Today, sostuvieron que el Dr. Evans fue el primer afroamericano en redactar una Biblia de estudio y una Biblia comentada y alguien que siempre instó a que las personas asuman la responsabilidad de sus actos.

El pastor evangélico tuvo un vínculo cercano con George W. Bush durante su presidencia y supo ser el centro de atención de los medios en 2012 cuando criticó abiertamente al entonces presidente Barack Obama por apoyar el matrimonio entre personas del mismo sexo.

Traducción de María Luz Avila