¿Cuál es la renovada política de Estados Unidos en la frontera con México?
La administración Biden está preparada para restablecer una política de la era Trump que obliga a los solicitantes de asilo a esperar en México por sus audiencias en la corte de inmigración de Estados Unidos esta semana con cambios y adiciones
La administración Biden se prepara para restablecer una política de la era Trump esta semana para hacer que los solicitantes de asilo esperen en México por sus audiencias en la corte de inmigración de EE.UU., con cambios y adiciones.
Los primeros migrantes serán enviados de El Paso Texas, de regreso a Ciudad Juárez, según un funcionario estadounidense que habló bajo condición de anonimato debido a que los detalles no se hicieron públicos. El tiempo seguía su paso a medida que los funcionarios llevaban a cabo los preparativos finales, pero los retornos desde El Paso pueden comenzar el lunes o martes, con un límite de 50 personas por día.
El Departamento de Seguridad Nacional no respondió de inmediato a las preguntas del lunes sobre la ubicación y el horario.
El resurgimiento de la política de “Quédate en México” se produce incluso cuando la administración Biden maniobra para ponerle fin de una forma que sobreviva contra el escrutinio legal. El presidente Joe Biden descartó la política, pero una demanda de Texas y Missouri lo obligó a volver a ponerla en vigencia, sujeto a la aceptación de México.
¿CUÁL ES LA POLÍTICA DE 'QUÉDATE EN MÉXICO'?
Cerca de 70.000 solicitantes de asilo se han visto obligados a esperar en México por sus audiencias en Estados Unidos en virtud de la política que presentó el presidente Donald Trump en enero de 2019 y que Biden suspendió en su primer día en el cargo.
Los cruces fronterizos ilegales se redujeron de manera drástica después de que México, que enfrenta la amenaza de Trump de aplicar aranceles más altos, accedió en 2019 a la rápida expansión de la política. Los solicitantes de asilo fueron víctimas de gran violencia mientras esperaban en México y enfrentaron una serie de obstáculos legales, como el acceso a abogados e información de sus casos.
Solo el 1 por cientos de los solicitantes de asilo sujetos a la política recibieron ayuda, según El Centro de Intercambios de Acceso a Registros Transaccionales de la Universidad de Syracuse. Alrededor de seis de las 10 solicitudes fueron denegadas o desestimadas, y el resto están pendientes.
Solo uno de cada 10 tenía representación legal, muy por debajo del promedio en los tribunales de inmigración de EE.UU.
Los funcionarios de la administración Trump insisten en que la política fue fundamental para disuadir los cruces ilegales. Alejandro Mayorkas, secretario de seguridad nacional de Biden, dijo que es probable que la política contribuyó a una caída en los cruces en 2019, pero con “costos humanos sustanciales e injustificables” para los solicitantes de asilo que estuvieron expuestos a la violencia mientras esperaban en México. Los críticos dicen que la política, con el nombre oficial de “Protocolos de protección al migrante”, ignora la ley estadounidense y las obligaciones internacionales de asilo, que Trump calificó como “una farsa”.
¿EN QUÉ DIFIERE 'QUÉDATE EN MÉXICO' 2.0?
La versión de Biden amplía la política a los migrantes de los países del hemisferio occidental, mientras que Trump la limitó en gran medida a los países de habla hispana del hemisferio. Los mexicanos siguen exentos de esta política.
La expansión es sobre todo significativa para los haitianos, quienes formaron un campamento masivo en la ciudad fronteriza de Del Rio en Texas en septiembre. Los brasileños, que se salvaron en gran medida bajo Trump, también pueden verse afectados de manera contundente.
Estados Unidos intentará completar los casos dentro de 180 días, una respuesta a las preocupaciones de México de que languidecerán en un sistema judicial que está atrasado con 1,5 millones de casos.
Las autoridades estadounidenses preguntarán a los migrantes si temen ser devueltos a México en lugar de depender de que ellos planteen sus preocupaciones por su propia volición. Si los migrantes expresan temor, serán evaluados y tendrán 24 horas para encontrar un abogado o representante.
Los migrantes también tendrán la oportunidad de reunirse con abogados antes de cada audiencia, dicen los funcionarios estadounidenses. El Departamento de Estado trabaja con México en los sitios para dar acceso telefónico y por video a abogados en los EE.UU.
Muchos grupos de ayuda legal con sede en Estados Unidos que han representado a solicitantes de asilo que esperan en México dicen que ya no aceptarán tales casos. Los promotores sienten escepticismo ante las afirmaciones de funcionarios estadounidenses y mexicanos de que es probable que otros abogados tomen estos casos.
¿QUÉ DICE MÉXICO?
El juez federal de distrito Matthew Kacsmaryk, designado por Trump en Amarillo, Texas, escribió en su fallo del 13 de agosto que el restablecimiento de la política estaba sujeto a la aceptación por parte de México. El secretario de Relaciones Exteriores de México dijo el jueves que permitiría retornos “por razones humanitarias” después de los cambios y adiciones que prometió la administración Biden.
Todos los migrantes sujetos a la política serán vacunados contra el covid-19. Los adultos recibirán la vacuna Johnson & Johnson, que solo requiere una inyección. Los niños que son elegibles según las pautas de los EE.UU. recibirán la vacuna Pfizer, con segundas inyecciones cuando ingresen a los EE.UU. para sus primeras audiencias.
Durante las negociaciones, los funcionarios mexicanos expresaron su preocupación por el retorno de los migrantes al estado de Tamaulipas, un área en particular peligrosa al otro lado de la frontera con el sur de Texas, el corredor más transitado para los cruces ilegales. Buscaron el apoyo financiero de Estados Unidos para obtener más espacio para refugios, pero solo consiguieron compromisos indefinidos.
Con el tiempo, la política se ampliará a otras seis ubicaciones además de El Paso: San Diego y Calexico en California; Nogales, Arizona; y las ciudades fronterizas de Texas de Brownsville, Eagle Pass y Laredo.
Se está llevando a cabo una planeación para proporcionar transporte desde y hacia la frontera dentro de México. Los migrantes que regresan a Tamaulipas desde Brownsville, Eagle Pass y Laredo podrían ser trasladados a lugares más al sur de México por su seguridad personal.