Expertos piden cautela ante el uso del chatbot de inteligencia artificial DeepSeek por vínculos con China

Los expertos en seguridad instan a los usuarios a ser cautelosos a la hora de utilizar el chatbot de inteligencia artificial DeepSeek, debido a los vínculos de la aplicación con China y a las posibles implicaciones para los datos personales.

El chatbot ha revolucionado el mercado de la inteligencia artificial con su aparición como rival de empresas como ChatGPT y OpenAI, a pesar de haber sido desarrollado aparentemente por una fracción del presupuesto de sus grandes rivales estadounidenses.

Sin embargo, algunos expertos han expresado su preocupación por el uso de la aplicación, ya que DeepSeek tiene su sede en China y, como consecuencia, podría haber “riesgos” para la privacidad de los datos.

Varias grandes empresas y tecnológicas chinas se han visto sancionadas en los últimos años —sobre todo Huawei y TikTok— por el temor a que el Gobierno chino recopile datos con fines de inteligencia.

Estados Unidos ya anunció que está examinando los posibles riesgos para la seguridad nacional en torno a DeepSeek.

Bill Conner, director ejecutivo de la empresa de automatización Jitterbit y exasesor de seguridad de los gobiernos británico y estadounidense, afirmó que DeepSeek “representa un riesgo evidente para cualquier empresa cuya dirección valore la privacidad, la seguridad y la transparencia de los datos”.

“Las empresas proactivas y preocupadas por la privacidad deben realizar una diligencia debida estricta con todos los grandes modelos lingüísticos (LLM) y servicios de IA, no solo con DeepSeek”, dijo.

“Pero en este caso, y como se indica en su propia política de privacidad, DeepSeek es un servicio compartido en la nube que se ejecuta en China y cuyos datos se almacenan en China, lo que potencialmente introduce riesgos desconocidos para la privacidad de los datos, los mandatos de cumplimiento y los controles de seguridad”.

Los analistas del sector de Forrester recalcaron esta preocupación, y varios de sus expertos señalaron en una entrada de blog conjunta que la política de privacidad de DeepSeek reconocía que la aplicación recopilaba datos de los usuarios y podía compartirlos con “las autoridades públicas a su discreción”.

“Las descargas masivas de DeepSeek significan que miles (e incluso millones) de usuarios están haciendo experimentos y subiendo a la aplicación lo que podría ser información sensible”, afirman los analistas.

“Según su política de privacidad, DeepSeek establece de manera explícita que puede recopilar ‘su entrada de texto o audio, solicitud, archivos subidos, comentarios, historial de chat u otro contenido’ y utilizarlo con fines de formación”.

“También afirma que puede compartir esta información con las fuerzas del orden y las autoridades públicas a su discreción”.

“Eduque e informe a sus empleados sobre las ramificaciones de utilizar esta tecnología e introducir en ella información personal y de la empresa”.

El profesor Allen Tucker, catedrático de inteligencia artificial y director del grupo de Análisis Inteligente de Datos de la Universidad Brunel de Londres, afirma que los chatbots de IA en general deben abordarse con cautela.

“Ambos se han diseñado sin tener en cuenta ningún caso de uso. En esencia, son juguetes para que la gente diga ‘guau’ en lugar de resolver un verdadero problema”, afirmó.

Al comparar DeepSeek con el líder del mercado ChatGPT, el profesor Tucker añadió: “Además, ambos están profundamente imbricados en la política de sus países y, por tanto, hay que tratarlos con mucha cautela: si intentas preguntarles a cualquiera de los dos sobre temas controvertidos, disimularán, cambiarán de tema o cerrarán la conversación”.

_{Traducción de Michelle Padilla}