Hombre británico queda varado en Grecia después de sufrir cinco ataques al corazón en su cumpleaños

El propietario de un pub que sufrió cinco infartos en su cumpleaños mientras estaba de vacaciones en Grecia tiene “suerte de estar vivo”, pero ahora está postrado en cama en un hospital del país varias semanas después.

Él “con suerte tomará un vuelo a casa en tres días”, según su esposa.

Patrick “Patch” Kettleborough, de 38 años, de Bolsover, cerca de Chesterfield, Inglaterra, no ha podido regresar al Reino Unido desde que sufrió dos ataques cardíacos mayores y tres menores menos de un día después de llegar a Malia, Creta, el viernes 23 de septiembre.

La esposa de Patch, Lisa Kettleborough, de 40 años, dijo que temía que su esposo, con quien ha estado casada 18 años, muriera después de sufrir fuertes dolores en el pecho ese sábado por la mañana cuando desayunaron junto con dos amigos.

La pareja, que administra el pub Blue Bell en Bolsover, viajó a Grecia como sorpresa para celebrar el cumpleaños número 38 de Patch, pero Lisa relató que las vacaciones que planeaba se convirtieron de manera súbita en una situación “absolutamente descorazonadora”.

Sus hijos Jamie, de 15 años, y Lily, de 16, viajaron al país para ver a su padre en el hospital, pero la pareja sigue varada en Grecia, no puede trabajar y pide ayuda financiera al público.

“Toda la situación es absolutamente descorazonadora”, expresó Lisa.

“Cuando se apresuraron a subirlo a la ambulancia, tuve miedo de que se fuera a morir”.

“Fue muy aterrador, pero lo logró. Estoy tan orgullosa de él”.

Lisa y Patch llegaron la tarde del viernes 23 de septiembre y fueron a tomar unos tragos con sus amigos.

Al día siguiente, el cumpleaños número 38 de Patch, Lisa notó un comportamiento inusual en su pareja.

Ella dijo: “Desde el principio el sábado por la mañana, Patch no había sido él mismo y, en un par de ocasiones, sintió un dolor bastante fuerte en el pecho”.

“En ese momento decidí que iba a insistir y llevarlo al centro médico. Cuando entré, todavía pensaba que era un ataque de ansiedad”.

Lisa agregó: “Lo llevaron directamente a una habitación y me dijeron que llenara los documentos del seguro”.

“Salió una enfermera y me habló en griego, pero supe que algo andaba mal por la forma en que actuó. Grité por el pasillo: ‘Es un infarto’”.

Subieron a su pareja en la parte trasera de una ambulancia y la llevaron a un hospital en una ciudad cercana, y luego lo trasladaron a otro hospital especializado, el Hospital Universitario de Heraklion, donde le colocaron un stent en el corazón.

Era necesario colocar un stent, que es un tubo corto de malla de alambre que actúa como un andamio para ayudar a mantener abierta una arteria, según NHS Inform, porque las arterias de Patch estaban “prácticamente cerradas”.

Lisa dijo: “La colocación del stent salió muy bien. Me dijeron que tuvo dos infartos y unos tres pequeños, ya que una arteria estaba bloqueada en un 90 por ciento y la otra en un 60 por ciento”.

“Los médicos dijeron que realmente no sabían cómo sobrevivió y que tuvo mucha suerte de estar vivo”.

Después de su operación de stent, trasladaron a Patch directamente a cuidados intensivos.

A pesar de no poder verlo durante dos días, su esposa iba todos los días al hospital desde su hotel, que estaba a una hora de distancia.

Ella relató: “Me senté afuera de cuidados intensivos, para que supiera que no estaba lejos y que si algo sucedía, yo estaría allí”.

“No quería estar allí y nunca quise que sucediera nada trágico. Hice los arreglos para que mi suegra y mis hijos tomaran un vuelo, porque no sabía en qué iba a resultar todo”.

Hasta el tercer día de la admisión de Patch en el hospital, el martes 27 de septiembre, a Lisa se le permitió verlo debido a su mala salud y a su alto riesgo de contraer una infección.

Recordó: “Me permitieron entrar durante cinco minutos, pero tenía que usar una mascarilla y un delantal y no podía tocarlo”.

Lisa agregó: “Había cables sobre él, pero él estaba hablando conmigo. Verlo fue bastante angustioso, muy triste y no se veía muy bien en cuidados intensivos ya que estaba conectado a todas las máquinas. Fue realmente difícil verlo”.

Una vez que sus hijos Jamie y Lily llegaron el 27 de septiembre, se les permitió ver a su padre durante 15 minutos cada uno.

“No hay palabras para describir cómo se sintió cuando nuestros hijos pudieron verlo”, aseveró Lisa.

“No soy una persona religiosa, pero le recé a Dios varias veces para que lo mantuviera con vida. Estoy tan agradecida”.

“Tuve que ser fuerte por los niños, pero después de que se fueron, lloré y lloré”.

Después de su ingreso inicial en el hospital, Lisa dijo que Patch “mejoraba un poco” cada día y se le permitió regresar a su hotel el viernes 30 de septiembre, el mismo día que sus hijos regresaron a casa en el Reino Unido, con la condición de que debe usar un monitor cardíaco y controlar su presión arterial tres veces al día.

Desafortunadamente, Patch no pudo quedarse en el hotel por mucho tiempo.

Las esperanzas de la pareja de volar de regreso a Inglaterra se desvanecieron cuando lo llevaron nuevamente al hospital el jueves 6 de octubre, 13 días después de su quíntuple ataque cardíaco en lo que Lisa llama un “giro extraño” después de que la condición de Patch empeorara.

Patch, quien también tiene dos hijos mayores de una relación anterior, estaba asustado y preocupado por no poder volver a casa, según su esposa.

Actualmente, la pareja todavía está varada en Grecia, pero tienen la esperanza de volar pronto.

Lisa añadió: “Patch estaba asustado por cómo sería el próximo vuelo, pero estamos ansiosos por llegar a casa. Hablamos con el médico de cabecera en casa y una vez que aterricemos, tenemos programada una visita con el médico de cabecera para que nos diga qué debemos hacer una vez que lleguemos”.

Cuando regresen al Reino Unido, Lisa espera que ella y Patch puedan obtener algunas respuestas sobre la causa de sus ataques al corazón.

“Creemos que tiene algún tipo de enfermedad cardíaca congénita, pero después de que se soluciona el problema inicial, deben investigar adecuadamente qué lo causó”, declaró Lisa.

No hubo indicadores de problemas cardíacos que provocaran los ataques cardíacos de Patch, según su esposa.

Aseguró: “Es completamente aleatorio, se siente así. Él estaba absolutamente bien antes, no había señales de que esto fuera a suceder”.

“Ambos estamos realmente preocupados de que vuelva a suceder cuando estemos en casa, por lo que estamos ansiosos por solucionarlo”.

El regalo sorpresa de cumpleaños se convirtió en un viaje de terror que impide que la pareja regrese a casa con sus hijos y también que regrese al trabajo en el Blue Bell.

Lisa añadió: “Ambos trabajamos muchas horas y el 100 por ciento de nuestro salario se ha ido”.

“Esperamos que recaudar algo de dinero para los gastos adicionales aquí en Grecia y para cubrir nuestros salarios hasta que podamos volver a trabajar nos facilite la vida”.

Además de sus dos hijos, que actualmente se están quedando con la madre de Patch, la pareja tiene dos perros, a los que Lisa dijo que su esposo “adora absolutamente” y que alguien más debe cuidar mientras ellos estén en Grecia.