Deberíamos evitar la cebolla y el ajo y beber agua a temperatura ambiente, recomienda dietista ayurvédica
La dietista Radhi Devlukia-Shetty creció con el ayurveda sin darse cuenta; ahora es una forma de vida
Debido al cansancio extremo de la vida moderna, la búsqueda de café o azúcar para animarnos y seguir adelante parece ser un elemento obligatorio de la rutina. Sin embargo, la influencer del bienestar y escritora de cocina Radhi Devlukia-Shetty cree que se puede resolver con comida.
“Si comemos alimentos con energía casi inactiva, que en realidad no nos proporcionan los nutrientes que necesitamos, por supuesto que nos vamos a sentir cansados”, señala la mujer de 33 años.
Devlukia-Shetty, proveniente de una familia de vegetarianos, la dietista calificada y esposa del monje convertido en entrenador de vida y presentador de pódcasts, Jay Shetty, comparte: “No tomo café. He tratado de no consumir cosas de las que mi cuerpo dependa para obtener energía. Porque cuando tengo antojos de azúcar, sé que es una señal de que no estoy obteniendo suficiente cantidad de lo que necesito”.
Radhi sostiene que la comida, junto con nuestros hábitos y pensamientos diarios, tiene la capacidad de transformar por completo cada aspecto de nuestra salud.
“Todos los alimentos que comemos deben hacernos sentir llenos de energía; se supone que eso es lo que deben hacer, ¿verdad? Mientras que hay muchos alimentos que comemos que nos hacen sentir letárgicos, tristes y muy pesados por dentro”.
Devlukia-Shetty se volvió vegana hace una década y comparte recetas a base de plantas y llenas de nutrientes con sus 2,3 millones de seguidores de Instagram, y acaba de publicar su primer libro de cocina, JoyFull.
Su famoso marido, del exitoso pódcast On Purpose, es el “conejillo de indias” de sus recetas. “No diría que es alguien a quien le gusta estar en la cocina, es feliz lavando platos. ¡Pero para ser honesta, no lo dejo entrar a la cocina!”.
La propia Devlukia-Shetty es oriunda de Watford, pero la pareja ahora vive en Los Ángeles (“Me encanta un lugar donde puedes pasar mucho tiempo al aire libre”). Sus padres son indios, por lo que creció con el sistema de medicina ancestral ayurveda.
“Mi madre solía practicar muchos hábitos ayurvédicos, pero yo ni siquiera había oído hablar del término antes. Es simplemente parte de la cultura india que me ha sido transmitida a través de mi abuela y mi madre”.
Ayurveda se traduce como “la ciencia de la vida” en sánscrito (ayur es vida, veda es conocimiento) y existe desde hace unos 5.000 años.
“Ya fuera el uso de especias para curar el cuerpo o el ritual de usar un raspador de lengua, siempre que me cortaba, mi madre no me ponía un vendaje con curación, sino un parche de cúrcuma en la herida. Cuando tenía tos, usaba semillas de ajwain (especias y agua caliente) y me las daba”.
Ahora vive según muchos de los principios del ayurveda, después de haberlo estudiado en California, incluidos despertarse a las 5 de la mañana y meditación diaria, ejercicio matutino y tiempo para reflexionar, pero también lo incorpora a su comida. En un nivel muy básico, fomenta el consumo de más plantas y más especias.
“Me convertí en científica en la cocina experimentando con diferentes especias. Cada vez que tenía dolor de muelas, intentaba usar aceite de clavo en lugar de medicamentos que se consiguen en las tiendas. Me convertí en mi propio laboratorio humano, donde simplemente hacía experimentos conmigo misma y realmente veía: ¿qué me aportan estas prácticas?”.
Según explica, a cada persona le funcionarán unas cosas u otras, pero en esencia se trata de crear un entorno, interno y externo, que sea “óptimo para prosperar”. Se puede conseguir mucho con cambios sutiles en nuestra rutina diaria.
Todos los alimentos que comemos deben hacernos sentir llenos de energía; se supone que eso es lo que deben hacer, ¿verdad? Mientras que hay muchos alimentos que comemos que nos hacen sentir letárgicos, tristes y muy pesados por dentro
En sus recetas, la cebolla y el ajo no están en el menú (según Devlankia-Shetty causan más daño que bien en grandes cantidades, y la mayoría de nosotros tendemos a usarlos como base de sabor en muchos platos). Pero encontrarás platillos como boloñesa con nueces y lentejas, tacos tandoori y papas bombay masala, algunos de herencia familiar.
Un truco de bienestar sobre el que ha publicado en las redes sociales, y que ha despertado mucho interés, es dejar de tomar agua fría.
“¡Dios mío, es una diferencia enorme!”, afirma. “En Estados Unidos, los cafés y las bebidas heladas son muy comunes. Cuando empecé a tomar más bebidas heladas de forma constante durante días, me tomaba un matcha latte con hielo todas las mañanas y noté que mi digestión y mis niveles de energía cambiaban”.
“Sentía más malestar en el estómago, sobre todo cuando la tomaba con las comidas, era incómodo”. Aunque el agua fría sí te mantendrá hidratado, según el ayurveda, puede ralentizar nuestro sistema digestivo.
Ahora, cuando sale, pide agua a temperatura ambiente en lugar de fría, y en casa bebe “té sin parar”, de hierbas o una mezcla de semillas de cilantro, semillas de comino y semillas de hinojo maceradas en agua caliente.
“Una de las cosas por las que más me pregunta la gente es por el agua”, dice riendo. Una vez, durante una caminata por las colinas de Los Ángeles, una mujer que subía debajo de ella le gritó: “¡Radhi! ¡Bebo agua de la manera correcta gracias a ti!”.
Pero sincronizarnos con nuestros cuerpos también significa sincronizarnos con la naturaleza. Devlukia-Shetty cree que nuestra digestión sigue el mismo ritmo que el sol y la luna. “Cuando sale el sol, nuestro cuerpo se despierta lentamente, nuestra digestión se despierta después de ocho horas de estancamiento. Por eso se recomienda realizar una pequeña comida por la mañana para avivar la digestión y acelerarla para empezar a comer”.
“Luego por la tarde, cuando el sol está en su punto más alto y más fuerte, nuestra digestión está en su punto máximo, por lo que se recomienda realizar una comida copiosa por la tarde, porque es entonces cuando nuestro cuerpo puede digerirla”.
“Luego, cuando el sol empiece a ponerse por la noche, hay que comer más ligero antes de dormir, ya que la digestión comenzará a relajarse”.
Radhi explica que con estos hábitos, además de disfrutar las comidas con gratitud y presencia de ánimo, se crea lo que se llama prana o “fuerza vital” en el cuerpo.
Pero todo se trata de lo que funciona para cada quien. “Dejé de estar en sintonía con mi cuerpo cuando empecé a escuchar a los demás y lo que hacían con el suyo”.
“Me tomé un tiempo para volver a sintonizarme a mí y fue entonces cuando recuperé mi verdadera salud.”