México en estado de espera ante posibles ajustes en las medidas arancelarias de Trump

México está en ascuas. ¿Podrán frenarse o ajustarse los aranceles impuestos por Donald Trump?
En la frontera norte mexicana líderes transportistas hablan de aduanas con poca actividad. Los inversionistas se mantienen cautos y la presidenta Claudia Sheinbaum está a la espera de un diálogo con su homólogo estadounidense mientras las llamadas con funcionarios de ese país se multiplican.
Todos los mexicanos esperan un posible acuerdo que ambos gobiernos dejaron entrever que podría concretarse.
“Es un momento muy definitivo para México dependiendo de lo que pase estos días”, dijo el miércoles Sheinbaum en su conferencia matutina. “El secretario de Comercio (de Estados Unidos) ya estaba buscando un esquema de acuerdo... un esquema distinto”, agregó.
En entrevista el miércoles con Bloomberg Televisión, el secretario Howard Lutnick dijo que podría haber excepciones en algunos sectores a los aranceles de 25% generales impuestos la víspera a Canadá y México y mencionó que un área exenta podría ser la automotriz, uno de los sectores de mayor impacto en las relaciones comerciales.
El martes en otra entrevista, esa vez con la cadena Fox, Lutnick indicó que era posible llegar a un punto medio de entendimiento con México aunque no se suspendan los gravámenes que habían entrado en vigor en los primeros minutos del día y que fueron contestados tanto por Canadá como por México con el anuncio de aranceles recíprocos y posibles acciones legales por la violación del tratado de libre comercio norteamericano.
La administración estadounidense, que también duplicó los aranceles a China, ha afirmado que estas medidas tienen como objetivo detener el tráfico de fentanilo —una de las drogas más letales y lucrativas— pero Trump también sugirió que los aranceles buscan eliminar los persistentes déficits comerciales de su país.
Sheinbaum no hizo comentarios específicos sobre la posibilidad de que el sector automotriz sea uno de los que queden exentos de los aranceles de Trump e insistió en esperar a que haya anuncios oficiales desde la Casa Blanca o a la llamada prevista con el presidente para el jueves. Agregó que el domingo en la principal plaza del país —el Zócalo de Ciudad de México— informará al país las medidas que tomará.
La posibilidad de una guerra comercial mantiene en alerta a los mercados globales y preocupa mucho por sus enormes impactos en economías que están íntimamente interconectadas. Más del 80% de las exportaciones mexicanas se dirigen a Estados Unidos, país con el que el flujo comercial se sitúa en torno a los 840.000 millones de dólares anuales.
“Nosotros hemos hecho nuestra tarea y ni siquiera cerramos las puertas del diálogo", subrayó Sheinbaum. Según dijo, este mes se llegó a “muchísimos acuerdos" con Washington pero, aún así, hay una decisión “unilateral” del vecino del norte. "No es una responsabilidad nuestra, es una decisión del presidente de los Estados Unidos”.
La mandataria, que envió varios mensajes en redes sociales pidiendo unidad y tranquilidad a los mexicanos, afirmó que también que se buscará a Canadá y a otros países para abordar el nuevo panorama y mencionó que el presidente chileno Gabriel Boric ya le expresó su solidaridad el martes en una llamada.
En la frontera, un día después de la decisión de Trump, lo más visible era la reducción de los cruces de camiones.
“Las aduanas mas grandes de la frontera norte en México registran un absoluto silencio”, escribió en X el martes a última hora Ismael Delgado, líder transportista en el noroeste mexicano. “La guerra de aranceles se deja ver ver y sentir con la reducción brutal de cargas hacia Estados Unidos”.