Anna Delvey sobre arresto domiciliario: “Dijeron que me deportarían a Marte antes de que saliera a NY”
Delvey dijo que estaba “muy feliz” de regresar a Manhattan y elogió a su abogado por “alinearse con su visión” y luchar por obtener su libertad bajo fianza
La falsa heredera alemana Anna Delvey, en quien se centra el exitoso drama de Netflix Inventing Anna, habló sobre su liberación de prisión bajo arresto domiciliario y cómo “trata de arreglar” lo que hizo mal.
En su primera entrevista tras su liberación del Centro de Detención del Condado de Orange, donde pasó 18 meses después de que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) de EE.UU. determinará que había sobrepasado el tiempo permitido por su visa, Delvey dijo que estaba “muy feliz” de regresar a Manhattan, y celebró a su abogado por “alinearse con su visión” y luchar para obtener su fianza.
“Nada estaba garantizado. [Me] Negaron la libertad bajo fianza antes. Fue un ejercicio de perseverancia”, dijo Delvey a The New York Times. “Muchos abogados de inmigración me dijeron que me deportarían a Marte antes de que saliera a Nueva York. Y solo tenía que encontrar a la persona que [no] aceptaría un ‘no’ como respuesta y hacer que sucediera".
Delvey, de 31 años, estafó a amigos y grandes bancos por cientos de miles de dólares por lo que fue condenada en 2019 por fraude y hurto mayor y sentenciada a entre cuatro y 12 años de prisión. Después de pagar a sus víctimas, Delvey fue liberada brevemente en febrero de 2021, pero luego ICE la arrestó.
Un juez ordenó su liberación bajo arresto domiciliario a principios de esta semana después de determinar que su condición de “figura pública” le dificultaba evitar la detención, y su “riesgo de fuga [está] suficientemente mitigado”, según documentos obtenidos por The Daily Beast.
Delvey le dijo al Times que no quería pelear su caso de inmigración de Alemania porque no quería que la gente pensara que a ella solo le importa la “obscena riqueza”, y que no podría soportar pasar un periodo en la cárcel.
“... Y esa no es la realidad. Podría haberme ido, pero elegí no hacerlo porque estoy tratando de arreglar lo que hice mal. Tengo tanta historia en Nueva York y sentí que si estuviera en Europa, estaría huyendo de algo. Pero si la cárcel no demuestra que la gente está equivocada, ¿entonces qué lo hará?”, agregó.
Cuando se le preguntó cómo obtuvo el dinero para pagar su fianza de US$10.000 y el alquiler de su apartamento en East Village, más tres meses por adelantado, Delvey simplemente le dijo al Times que “le preguntara al gobierno. Agregó que el dinero era suyo.
“John [Sandweg], mi abogado, encontró [el apartamento] para mí. Obviamente no pude hacer nada desde la cárcel. Tengo un gran equipo a mi alrededor, así que todo fue gracias a ellos”, explicó.
En cuanto a los beneficios que obtendrá en arresto domiciliario, Delvey dijo que espera mejor comida y está emocionada de tener visitas después de la 1:30 pm los jueves.
Delvey también le contó al Times que ahora tiene una mejor relación con sus padres y los llama “cada dos días”. Aunque está emocionada por reanudar su trabajo en el arte, Delvey dijo que tiene mucho más en juego y que recientemente ha estado trabajando en un podcast.
“Pero aún no ha tomado forma. Fue bastante difícil grabar algo de alta calidad desde la cárcel”, comentó Delvey. “Y luego está mi libro. Me encantaría hacer algo con la reforma de la justicia penal para resaltar las luchas de otras chicas”.
Agregó que no dará a los críticos la satisfacción de verla fracasar y les advierte que no esperen que haga algo “loco o ilegal”.
“Aprendí mucho estando en la cárcel. Hay un arco muy bien documentado sobre cómo me he sentido acerca de todo. No estaría bien si simplemente cambiara un día”, expresó Delvey al Times. “Lamento cómo se desarrollaron las cosas. La forma en que he tratado de ver mi experiencia es aprender de ella: quien soy hoy es resultado de las decisiones que tomé en el pasado”.
En un fallo emitido a principios de esta semana, el juez Conroy señaló que Delvey había demostrado “interés en buscar un empleo legítimo en los Estados Unidos, actividades que enfrentarán un fuerte escrutinio público”, lo que en última instancia disminuirá su riesgo de fuga.
En su juicio en 2019, Delvey fue declarada culpable de estafar por más de US$200.000 a hoteles, bancos y otras instituciones. Se hizo pasar como heredera alemana para robarles grandes sumas a socios y amigos.
La historia de la estafadora nacida en Rusia fue dramatizada en la serie de Netflix Inventing Anna. Insider informó que Netflix pagó a Delvey US$320.000, pero sus fondos fueron congelados y utilizados para pagar a sus víctimas.