¿Quién es José Ibarra, el hombre juzgado por el asesinato de la estudiante Laken Riley en Georgia?
Poco después de su detención, se reveló que José Ibarra había entrado ilegalmente en EE.UU. en 2022, lo que puso el caso en el centro del debate político en el país
Una mañana de febrero de este año, Laken Riley, estudiante de enfermería de 22 años, salió a correr por el campus de la Universidad de Georgia, EE. UU. Nunca regresó.
Su desaparición desencadenó una búsqueda desesperada para encontrarla y llevarla a casa sana y salva. Lamentablemente, la búsqueda que tuvo un trágico final ese mismo día, cuando se encontró su cuerpo golpeado junto a la ruta por la que corría. Riley había muerto de un traumatismo por objeto contundente en el ataque.
Ahora, José Antonio Ibarra (26) está siendo juzgado por el asesinato de la mujer.
Estaba previsto que el juicio de Ibarra comenzara el 13 de noviembre con la selección del jurado; sin embargo, en una audiencia previa al juicio celebrada un día antes, Ibarra renunció a su derecho a un juicio con jurado y solicitó en su lugar un juicio sin jurado (en el que un juez determina los hechos y dicta sentencia sobre el caso).
El viernes 15 de noviembre, comenzó por fin el juicio, en el que los fiscales relataron al tribunal cómo la estudiante de enfermería “[había luchado] por su vida y su dignidad” contra un hombre que ese día había salido “a la caza” de mujeres.
La fiscal Sheila Ross dijo que cuando Ibarra se topó con Riley, ella “se [había defendido]”. También relató que cuando ella “se [había negado] a ser víctima de violación, él le [había golpeado] el cráneo con una piedra repetidamente”.
Por su parte, el abogado defensor Dustin Kirby dijo en su discurso de apertura que la muerte de Riley fue una tragedia, y calificó las pruebas del caso de gráficas e inquietantes. Sin embargo, dijo que no había pruebas suficientes para demostrar que el asesino fuera Ibarra y cuestionó cómo podían estar sus huellas dactilares en el teléfono si supuestamente llevaba guantes.
“Las pruebas en este caso dejan claro que Laken Riley fue asesinada”, dijo Kirby, y añadió: “No obstante, las pruebas de que José Ibarra mató a Laken Riley son circunstanciales”.
Ibarra, quien procede de Venezuela y no es ciudadano estadounidense, no tenía ninguna relación conocida con la estudiante ni antecedentes penales violentos conocidos. Los investigadores describieron la muerte violenta de Riley como un “crimen de oportunidad”.
La condición de no ciudadano estadounidense de Ibarra suscitó informes contradictorios de las fuerzas de seguridad sobre su pasado delictivo en suelo estadounidense y, en un año electoral, incitó a los legisladores republicanos a aprovechar la retórica antiinmigrante del momento para promover en Internet teorías ofensivas sobre los inmigrantes. El presidente Joe Biden también provocó una reacción violenta entre algunos demócratas tras referirse a él como “un ilegal” durante su encendido discurso sobre el estado de la Unión de este año.
Esto es lo que sabemos hasta ahora sobre el sospechoso de asesinato:
¿Quién es José Antonio Ibarra?
Según los registros del ICE (Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de EE. UU.), Ibarra es un inmigrante venezolano de 26 años, y parece haber entrado por primera vez en Estados Unidos en los últimos dos años.
El 8 de septiembre de 2022, funcionarios de Aduanas y Protección Fronteriza se toparon con Ibarra después de que cruzara la frontera sur de Estados Unidos con México cerca de El Paso, Texas, de acuerdo a un comunicado de ICE enviado al noticiero regional ABC7. De acuerdo a las autoridades, quedó “en libertad condicional y fue liberado para su posterior procesamiento”.
Además de esto, representantes de la agencia informaron en un comunicado que Ibarra había sido arrestado por el Departamento de Policía de Nueva York el 14 de septiembre de 2023 y “acusado de actuar de manera violenta contra un niño menor de 17 años y [de] una violación de licencia de vehículos de motor”.
La policía de Nueva York habría liberado entonces a Ibarra “antes de que pudiera emitirse una orden de detención”. Sin embargo, un portavoz de la policía de Nueva York dijo a The Independent en ese momento que no había ninguna detención registrada, por lo que no fue posible confirmar si este reporte era correcto.
No se conocía ninguna conexión entre Ibarra y Riley, según aclaró el jefe de policía de la Universidad de Georgia, Jeff Clark, en una rueda de prensa tras el asesinato. “Se trató de un crimen de oportunidad en el que [Ibarra] vio a una persona y ocurrieron cosas malas”, expresó Clark.
Según los fiscales, Ibarra atacó a Riley mientras esta salía a correr.
De acuerdo con la declaración jurada, se acusó a Ibarra de “desfigurarle el cráneo” a Laken, lo que justificaba el cargo de agresión con agravantes. En la denuncia también se afirmó que Ibarra había utilizado un objeto para hacerle daño y que había arrastrado su cuerpo a una “zona apartada”.
Horas después de que Riley fuera asesinada, los detectives de homicidios de Athens sacaron una foto de una cámara de vigilancia de un posible sospechoso con una gorra Adidas distintiva, según una declaración jurada federal obtenida por The Associated Press.
Finalmente, la investigación les condujo a un complejo de apartamentos fuera de la universidad, donde registraron los terrenos y empezaron a recabar detalles sobre José Antonio Ibarra.
Ibarra fue detenido y acusado de un delito de homicidio premeditado, tres delitos de asesinato capital y sendos delitos de secuestro, agresión con agravantes, lesiones con agravantes, obstaculización de una llamada telefónica de emergencia, manipulación de pruebas y mirón.
Asimismo, el día del asesinato de Riley, Ibarra se habría asomado a la ventana de un apartamento de un edificio de viviendas universitarias, lo que constituye la base de la acusación de mirón.
Su juicio sin jurado comenzó el viernes 15 de noviembre, después de que renunciara a su derecho a un juicio con jurado.
Por su parte, los fiscales han optado por no solicitar la pena de muerte, sino una condena a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
Traducción de Sara Pignatiello