Jueza en caso de documentos clasificados de Trump acepta solo una de dos solicitudes de audiencia
La jueza federal que preside el caso de documentos clasificados del expresidente Donald Trump aceptó la solicitud de la defensa de una audiencia para determinar si la fiscalía violó el secreto profesional entre el abogado y su cliente cuando obtuvo pruebas cruciales de los antiguos abogados del acusado.
Sin embargo, la jueza de distrito de Estados Unidos, Aileen Cannon, también negó una solicitud para una audiencia sobre otra afirmación del equipo de Trump, según la cual el Departamento de Justicia había presentado información falsa o engañosa en la solicitud de una orden judicial para registrar la propiedad de Trump en Florida en busca de registros clasificados hace dos años.
La orden produce un resultado mixto para ambas partes, y garantiza más retrasos en un caso penal que ya se ha visto paralizado por importantes aplazamientos que han dado como resultado la postergación indefinida de un juicio cuyo inicio había sido programado para el 20 de mayo en Fort Pierce, Florida.
En un intento de suprimir como evidencia los documentos clasificados incautados por el FBI en el registro de la mansión de Mar-a-Lago el 8 de agosto de 2022, los abogados de la defensa han dicho que el Departamento de Justicia omitió o tergiversó ciertos hechos en su solicitud para obtener una orden judicial, presentada ante el juez de un tribunal inferior. Afirmaron que, por ejemplo, en la solicitud se debió señalar que un oficial de alto rango del FBI propuso obtener el consentimiento de los abogados de Trump para realizar el registro, en lugar de conseguir una orden judicial autorizada por el tribunal.
Pero Cannon estuvo de acuerdo con el equipo del fiscal Jack Smith al determinar que ni esa ni ninguna otra de las presuntas omisiones planteadas por la defensa tenían que ver con el hecho de que la fiscalía tuviera o no una causa probable suficiente para registrar la propiedad.
“Aun aceptando esas declaraciones del oficial del FBI de alto rango, la moción no ofrece una base suficiente para creer que la inclusión en la declaración jurada del punto de vista de dicho oficial (o de las opiniones discrepantes de otros agentes del FBI, según se hace referencia de forma general en su testimonio) habrían alterado el cálculo de evidencia en apoyo de una causa probable de los presuntos delitos”, escribió Cannon.
Pero su decisión no fue una victoria completa para el gobierno, ya que dijo que programaría una audiencia separada para considerar la cuestión de si la fiscalía había obtenido indebidamente la cooperación de los abogados mediante una excepción al secreto profesional entre el abogado y su cliente.