Familia de Emmett Till decepcionada luego de que el Departamento de Justicia cerrara investigación de linchamiento sin nuevos cargos
El brutal asesinato del adolescente inspiró a una generación de activistas por los derechos civiles
La familia de Emmett Till expresó su decepción luego de que el Departamento de Justicia cerrara la nueva investigación del linchamiento del adolescente ocurrida en 1955, sin presentar nuevos cargos.
“No me sorprende, pero estoy desconsolada”, lamentó Thelma Wright Edwards, prima de Emmett, ante los reporteros este lunes. “Tenía esperanzas de que pudiéramos obtener una disculpa, pero no pasó. No se resolvió nada. El caso está cerrado y tenemos que seguir adelante”.
Emmett, un chico negro de 14 años, fue brutalmente torturado y baleado por supuestamente silbar y hacer insinuaciones sexuales hacia una mujer blanca llamada Carolyn Bryant en Money, Mississippi.
Su cuerpo fue descubierto más tarde en el río Tallahatchie. Miles asistieron a su funeral en su natal Chicago. Su madre insistió en que la ceremonia fuera a cajón abierto, y las imágenes del cadáver mutilado de Emmett conmocionaron a la nación, enfatizando el tipo de violencia racista que enfrentaban los afroamericanos en el sur durante la época del Jim Crow.
“Hoy es un día que nunca olvidaremos”, dijo el reverendo Wheeler Parker, otro primo de Emmett. “Durante 66 años hemos sufrido... Yo sufrí tremendamente”.
Christopher Benson, profesor de periodismo y coautor con Parker de un libro sobre el caso de Emmett, también lamentó la decisión.
“Esta familia ha esperado 66 años para saber quién respondería por Emmett. Y ahora lo sabemos: nadie”, aseveró Benson. “Es tragedia sobre tragedia”.
Las autoridades reabrieron el caso hace tres años, después de que un nuevo libro de un historiador pareciera contradecir partes clave del registro original de lo que sucedió en el brutal asesinato.
El libro de 2017 The Blood of Emmett Till, del historiador Timothy Tyson, incluía la primera entrevista conocida con Carolyn Bryant, en la que la mujer parecía retractarse de su testimonio previo ante la corte donde había afirmado que Emmett la había tomado por la cintura y había usado lenguaje inapropiado.
“Esa parte no es verdad”, se cita a Bryant, hoy de más de 80 años, en el libro. “Nada de lo que hizo ese chico podría justificar lo que le sucedió”.
Carolyn Bryant, ahora conocida como Carolyn Donham, negó al FBI que alguna vez se hubiera retractado de su versión original de los hechos, y los agentes no pudieron encontrar ningún registro en las transcripciones de la entrevista de Tyson o grabaciones de audio que contuvieran tales comentarios.
Debido a la ambigüedad en torno a las declaraciones de la mujer, así como al largo período de tiempo transcurrido desde que se cometieron los delitos, el Departamento de Justicia concluyó que no podía presentar cargos contra ninguna persona viva en la investigación.
“Por lo tanto, sería imposible para los fiscales probar más allá de la duda razonable que la mujer se retractó intencionalmente de todo o parte de su testimonio ante el tribunal estatal, y que luego mintió al FBI cuando negó haberlo hecho”, escribió el Departamento de Justicia en un comunicado el lunes.
El historiador, un investigador de alto nivel en la Universidad de Duke, defendió su versión de los hechos, aunque se mostró escéptico de que las afirmaciones hechas en su libro pudieran dar lugar a nuevos cargos.
“Porque lo único que ella me reveló es el perjurio, que testificó falsamente en la corte”, le dijo a The Washington Post. “El estatuto de limitaciones sobre eso expiró en 1958”.
El académico también recibió una copia de las memorias inéditas de Donham, More Than a Wolf Whistle: The Memoir of Carolyn Bryant Donham, que entregó a la Universidad de Carolina del Norte, y pidió que no se liberaran hasta 2036 o hasta la muerte de Donham.